Sinopsis:
LA SOMBRA RENACE II
Por L.A. Lluck
En los tiempos del emperador romano, Marco Ulpio Trajano. Un humilde traductor del griego al latín, llamado Ulbraneas Balaur, fue convocado por el César para un trabajo especial; transcribir unos antiguos pergaminos, encontrados en un cofre, en los sótanos de un arcaico enclave en Dacia.
La tarea fue complicada, llevó a Ulbraneas recorrer las regiones más alejadas del imperio, hasta que finalmente se instalo en tierras fronterizas. En Taminava, después de varios años de investigación, y con la ayuda de los druidas germanos, logró cumplir su labor.
Los documentos guardaban información valiosa: Un compendio de leyendas míticas de una Era Olvidada, que enlazaban una historia fascinante, llena de Dioses, Semidioses, Héroes y Villanos. En un universo arcano, donde los humanos cohabitaban con otras especies (Elfos, Centauros, Ciclopes, Dnoros, Warloos, Enanos, Minotauros, Dragones, etc.), enmarcados en una profecía rancia, que parte de ella dice así:
“Los Hijos de la Claridad tuvieron tiempos malos, pero el destino será peor. Cuando la Sombra renazca carcomerá las entrañas de la tierra, los ríos podridos del Caldero Sombrío brotarán por doquier y el mundo se convertirá en una pesadilla macabra.”
(Fragmento del “Pergamino del Eco Mudo” de Vulccand, visionario de los elfos)
Los escritos mostraban un mundo en caos, donde de manera paralela otras exóticas civilizaciones libraban batallas épicas, y otros augurios estaban por cumplirse.
Sin embargo, los ojos del antiguo relato se centraban en la isla Brioxnnus, uno de los últimos lugares autónomos de la Tierra de Owwerk, que aun no había caído bajo el yugo de Hjoper (Viento Frio); el reino más poderoso de aquella época. Resaltaba la participación de Harnnir de Makkena y Chalaor, un par de jovencitos dedicados al ocio, que ofrecieron su ayuda a la princesa Handdartha en su afán de liberar la ciudadela de Edomuss recientemente subyugada, y rescatar a sus padres, los reyes de Brioxnnus, de las manos del usurpador Ghior “Crimitto” (Cráneo Loco); un monarca cruel y ambicioso.
No obstante, todo da un giro inesperado en la historia, un tenebroso secreto queda al descubierto… Los Golidhos (Elfos Oscuros) tienen en sus manos una droga llamada “Borbtob” (Agua que Eleva la Mente). Un elixir capaz de someter a todas las especies del mundo, al poseer propiedades estimulantes, alucinógenas y exageradamente adictivas. También, terribles “efectos secundarios” amenazan a los consumidores, pero las redes clandestinas obsesionadas por las riquezas y el poder, no les importan esas “nimiedades”, y pese a ello, lo ponen en circulación.
Estos inesperados acontecimientos, hacen que los personajes se adentren en una aventura llena de riesgos y misterios, donde los asesinatos, traiciones, tesoros y amoríos se mezclan en una trama extraordinaria, y solo la suerte podrá favorecerlos a encontrar el camino de la victoria.
El mundo no volverá a ser el mismo. Los escritos de Ulbraneas Balaur, muestran que La Guerra de los Golidhos es perenne, una lucha que hasta nuestros días nos ha alcanzado, y que sin percibirla, estamos inmersos en ella.
LA SOMBRA RENACE II
Por L.A. Lluck
En los tiempos del emperador romano, Marco Ulpio Trajano. Un humilde traductor del griego al latín, llamado Ulbraneas Balaur, fue convocado por el César para un trabajo especial; transcribir unos antiguos pergaminos, encontrados en un cofre, en los sótanos de un arcaico enclave en Dacia.
La tarea fue complicada, llevó a Ulbraneas recorrer las regiones más alejadas del imperio, hasta que finalmente se instalo en tierras fronterizas. En Taminava, después de varios años de investigación, y con la ayuda de los druidas germanos, logró cumplir su labor.
Los documentos guardaban información valiosa: Un compendio de leyendas míticas de una Era Olvidada, que enlazaban una historia fascinante, llena de Dioses, Semidioses, Héroes y Villanos. En un universo arcano, donde los humanos cohabitaban con otras especies (Elfos, Centauros, Ciclopes, Dnoros, Warloos, Enanos, Minotauros, Dragones, etc.), enmarcados en una profecía rancia, que parte de ella dice así:
“Los Hijos de la Claridad tuvieron tiempos malos, pero el destino será peor. Cuando la Sombra renazca carcomerá las entrañas de la tierra, los ríos podridos del Caldero Sombrío brotarán por doquier y el mundo se convertirá en una pesadilla macabra.”
(Fragmento del “Pergamino del Eco Mudo” de Vulccand, visionario de los elfos)
Los escritos mostraban un mundo en caos, donde de manera paralela otras exóticas civilizaciones libraban batallas épicas, y otros augurios estaban por cumplirse.
Sin embargo, los ojos del antiguo relato se centraban en la isla Brioxnnus, uno de los últimos lugares autónomos de la Tierra de Owwerk, que aun no había caído bajo el yugo de Hjoper (Viento Frio); el reino más poderoso de aquella época. Resaltaba la participación de Harnnir de Makkena y Chalaor, un par de jovencitos dedicados al ocio, que ofrecieron su ayuda a la princesa Handdartha en su afán de liberar la ciudadela de Edomuss recientemente subyugada, y rescatar a sus padres, los reyes de Brioxnnus, de las manos del usurpador Ghior “Crimitto” (Cráneo Loco); un monarca cruel y ambicioso.
No obstante, todo da un giro inesperado en la historia, un tenebroso secreto queda al descubierto… Los Golidhos (Elfos Oscuros) tienen en sus manos una droga llamada “Borbtob” (Agua que Eleva la Mente). Un elixir capaz de someter a todas las especies del mundo, al poseer propiedades estimulantes, alucinógenas y exageradamente adictivas. También, terribles “efectos secundarios” amenazan a los consumidores, pero las redes clandestinas obsesionadas por las riquezas y el poder, no les importan esas “nimiedades”, y pese a ello, lo ponen en circulación.
Estos inesperados acontecimientos, hacen que los personajes se adentren en una aventura llena de riesgos y misterios, donde los asesinatos, traiciones, tesoros y amoríos se mezclan en una trama extraordinaria, y solo la suerte podrá favorecerlos a encontrar el camino de la victoria.
El mundo no volverá a ser el mismo. Los escritos de Ulbraneas Balaur, muestran que La Guerra de los Golidhos es perenne, una lucha que hasta nuestros días nos ha alcanzado, y que sin percibirla, estamos inmersos en ella.
