«Yo no me rindo nunca y, ahora, mi tarea eres tú»
Estas son las palabras que Leo le dice a Ana cuando, de la noche a la mañana, deja de ser un compañero de clase más para convertirse en su profesor particular. Ninguno de los dos imagina lo que este cambio desencadenará en sus vidas.
Leo, un chico solitario de diecisiete años, atormentado por sus circunstancias personales, encontrará en Ana la luz que necesita para escapar de su tristeza. Sin embargo, ignora que la chica de sus desvelos esconde muchos secretos, algunos tan oscuros que, para poder mantener su palabra, deberá enfrentarse a pruebas mucho más duras de lo que jamás pensó.
Ambos tendrán que superar los retos de la araña si quieren escapar de su red, pero… ¿se atreverán a jugar hasta el final?
Estas son las palabras que Leo le dice a Ana cuando, de la noche a la mañana, deja de ser un compañero de clase más para convertirse en su profesor particular. Ninguno de los dos imagina lo que este cambio desencadenará en sus vidas.
Leo, un chico solitario de diecisiete años, atormentado por sus circunstancias personales, encontrará en Ana la luz que necesita para escapar de su tristeza. Sin embargo, ignora que la chica de sus desvelos esconde muchos secretos, algunos tan oscuros que, para poder mantener su palabra, deberá enfrentarse a pruebas mucho más duras de lo que jamás pensó.
Ambos tendrán que superar los retos de la araña si quieren escapar de su red, pero… ¿se atreverán a jugar hasta el final?