Esta obra no es una historia del cine. Tampoco es cine para la historia. Tan ambiciosas pretensiones quedan lejos de este cine con historia. La preposición que funde los términos de esta inseparable pareja no responde a otras acepciones que las recogidas en el mismísimo Diccionario de la lengua española: relación, compañía, colaboración, comunicación... Así pues, Cine con historia es el «certificado matrimonial» de una unión, la que sellaron hace ya más de un siglo ese invento genial patentado por los hermanos Lumière y la realidad que desde entonces ha venido colándose a través de su lente.
La selección de filmes comentados en estas páginas está limitada en el tiempo (de diciembre de 1995 a diciembre de 2008), no así en el espacio, porque hay cerca de una veintena de países representados en el catálogo de películas confeccionado, cintas estrenadas a lo largo de más de una década, pero cuyas imágenes y diálogos pueden convertirse en inestimables apoyos para descifrar una época -los últimos cincuenta años- o alguno de los episodios que la han marcado.
La selección de filmes comentados en estas páginas está limitada en el tiempo (de diciembre de 1995 a diciembre de 2008), no así en el espacio, porque hay cerca de una veintena de países representados en el catálogo de películas confeccionado, cintas estrenadas a lo largo de más de una década, pero cuyas imágenes y diálogos pueden convertirse en inestimables apoyos para descifrar una época -los últimos cincuenta años- o alguno de los episodios que la han marcado.