En este libro electronico se recogen los cinco volúmenes que consta esta obra.
La Historia de las Ideas Estéticas en España (Madrid, 1883–1889) es una de las obras fundamentales de Marcelino Menéndez Pelayo (1856-1912) y en general de la historiografía de la Estética, no española sino occidental, pues en gran medida se ocupa de esta última como preparación de aquélla.
La obra, que es resultado del compromiso adquirido por el autor con su maestro, a quien la dedica, Manuel Milá y Fontanals, padre de la Estética en España como disciplina moderna, está destinada a fundamentar teóricamente la Historia de la Literatura Española, objeto central del proyecto de Menéndez Pelayo. Consta de una Introducción acerca de las ideas estéticas griegas, latinas y del cristianismo antiguo; una segunda parte dedicada a las doctrinas producidas hasta finales del siglo XVII; una tercera dedicada al siglo XVIII y una última al siglo XIX.
Se trata de obra, además de extensa, singularísima en virtud de múltiples razones que empiezan por el ingente tratamiento de primera mano de una bibliografía amplísima, dispersa, pluridisciplinar y con frecuencia muy compleja, como en el caso especial de su detenida y temprana exposición del Idealismo estético alemán, sin apenas fuentes secundarias. Constituye asimismo no sólo una introducción al pensamiento estético antiguo y clásico en amplio sentido, sino también la más vivaz y completa visión del pensamiento estético europeo realizada en su tiempo y, por lo demás, una reconstrucción original e insustituible de las ideas estéticas en España desde la Edad Media hasta el siglo XIX
La crítica más reciente ha discernido en Historia de las Ideas Estéticas en España la invención de la “Historia de las Ideas Estéticas” y, por inclusión, en general de la “Historia de las Ideas”, género intelectual decisivo para la cultura humanística moderna. Esta nueva perspectiva, entre otras cosas, otorga a la Estética española un lugar relevante, que no había sido tomado en cuenta, tanto en el proceso de formación de las disciplinas humanísticas modernas como en el de autonomización y desarrollo de la disciplina Estética emprendido en el temprano siglo XVIII por los empiristas ingleses y, sobre todo, Baumgarten en Alemania, para madurar historiográficamente en tiempos de la escuela poshegeliana.
La Historia de las Ideas Estéticas en España (Madrid, 1883–1889) es una de las obras fundamentales de Marcelino Menéndez Pelayo (1856-1912) y en general de la historiografía de la Estética, no española sino occidental, pues en gran medida se ocupa de esta última como preparación de aquélla.
La obra, que es resultado del compromiso adquirido por el autor con su maestro, a quien la dedica, Manuel Milá y Fontanals, padre de la Estética en España como disciplina moderna, está destinada a fundamentar teóricamente la Historia de la Literatura Española, objeto central del proyecto de Menéndez Pelayo. Consta de una Introducción acerca de las ideas estéticas griegas, latinas y del cristianismo antiguo; una segunda parte dedicada a las doctrinas producidas hasta finales del siglo XVII; una tercera dedicada al siglo XVIII y una última al siglo XIX.
Se trata de obra, además de extensa, singularísima en virtud de múltiples razones que empiezan por el ingente tratamiento de primera mano de una bibliografía amplísima, dispersa, pluridisciplinar y con frecuencia muy compleja, como en el caso especial de su detenida y temprana exposición del Idealismo estético alemán, sin apenas fuentes secundarias. Constituye asimismo no sólo una introducción al pensamiento estético antiguo y clásico en amplio sentido, sino también la más vivaz y completa visión del pensamiento estético europeo realizada en su tiempo y, por lo demás, una reconstrucción original e insustituible de las ideas estéticas en España desde la Edad Media hasta el siglo XIX
La crítica más reciente ha discernido en Historia de las Ideas Estéticas en España la invención de la “Historia de las Ideas Estéticas” y, por inclusión, en general de la “Historia de las Ideas”, género intelectual decisivo para la cultura humanística moderna. Esta nueva perspectiva, entre otras cosas, otorga a la Estética española un lugar relevante, que no había sido tomado en cuenta, tanto en el proceso de formación de las disciplinas humanísticas modernas como en el de autonomización y desarrollo de la disciplina Estética emprendido en el temprano siglo XVIII por los empiristas ingleses y, sobre todo, Baumgarten en Alemania, para madurar historiográficamente en tiempos de la escuela poshegeliana.