En 1973, tras la muerte de su mujer en un accidente de coche, el poeta Steve Abbott se traslada con Alysia, su hija de dos años, a San Francisco, una ciudad que en aquel momento hierve de hombres gais en busca de liberación. Aunque pocos de ellos están además criando a una niña.
Steve se sumerge de inmediato en la vibrante escena cultural de San Francisco. Lleva a Alysia a fiestas de adultos, la pone delante del micrófono en sus lecturas poéticas y hace que se sienta cómoda en un ambiente de artistas, pensadores y escritores, en un frenesí de apartamentos y compañeros de piso que cambian sin parar.
Durante un tiempo, a Alysia su vida le parece de cuento de hadas, pero al llegar a la adolescencia algo empieza a no encajar. El mundo —pronto lo aprende— es hostil a la diferencia. Y por si aquello fuera poco una misteriosa enfermedad empieza a hacer estragos en la comunidad gay, poniendo en peligro a todos los habitantes de su universo. Incluido a su padre.