En 1973 mi vida dio un vuelco. Yo tenía catorce años. A mi padre se lo llevó el cáncer y a mi hermano mayor, mi querido hermano mayor del alma, se lo llevó la esquizofrenia y ya no he podido recuperarlo. Fueron acontecimientos que hasta el día de hoy he sobrellevado, pero jamás superado.
Los Beatles me llevaron de la mano hacia un paraje tranquilo y me protegieron de los caballos blancos que me querían abocar al precipicio de los lugares olvidados. Muchos amigos cayeron. Demasiados.
Todo fue porque, gracias a Sebas, mi hermano mayor del alma, encontré la Callejuela del Penique y fui a parar a los Campos de Fresas…
Juan Carlos Irigoyen Pérez
Los Beatles me llevaron de la mano hacia un paraje tranquilo y me protegieron de los caballos blancos que me querían abocar al precipicio de los lugares olvidados. Muchos amigos cayeron. Demasiados.
Todo fue porque, gracias a Sebas, mi hermano mayor del alma, encontré la Callejuela del Penique y fui a parar a los Campos de Fresas…
Juan Carlos Irigoyen Pérez