El tono con el que Margo escribe es casi siempre festivo. Hasta cuando nos habla de lo más terrible, recurre al guiño, al gracejo o al juego de palabras que despojan a la expresión de cualquier tremendisimo y la dotan de fresca vitalidad.
Víctor Gerardo Rivas
Este sitio es seguro
Usted está en un sitio seguro, habilitado para SSL. Todas nuestras fuentes son constantemente verificadas.