Esta es una tradición que aparece en civilizaciones muy antiguas como Egipto, Babilonia y otras. Hablar de los Gnomos, Hadas, Silfos y otros elementales, es tocar un tema inocente que nos permite volver a ser niños, cuando éramos naturalmente filósofos, buscadores de la verdad.
Decían los antiguos que la NAturaleza está separada en cuatro grandes planos alquímicos: Tierra, Agua, Aire y Fuego. Cada uno de estos planos tiene formas de vida, de energía que son descritos como pequeñas figuras parecidas a la humana, que viven siglos y que ayudan a los seres humanos en la conservación y el crecimiento de las plantas, la formación de los metales y de los cristales, así como a tener las aguas a distintas temperaturas y corrientes.
Descubramos a través de este relato un mundo invisible que sin embargo existe para aquellos que quieren ver con los ojos del alma.
Decían los antiguos que la NAturaleza está separada en cuatro grandes planos alquímicos: Tierra, Agua, Aire y Fuego. Cada uno de estos planos tiene formas de vida, de energía que son descritos como pequeñas figuras parecidas a la humana, que viven siglos y que ayudan a los seres humanos en la conservación y el crecimiento de las plantas, la formación de los metales y de los cristales, así como a tener las aguas a distintas temperaturas y corrientes.
Descubramos a través de este relato un mundo invisible que sin embargo existe para aquellos que quieren ver con los ojos del alma.