Contraportada de El Economista Invisible
Publicado en abril del 2009
¿Cómo podemos superar la crisis y evitar sus efectos negativos?, pues fácil, exigiendo café para todos. Tenemos que exigir al gobierno de España como pueblo soberano que somos que reparta entre empresas y trabajadores la misma cantidad que les ha dado a los banqueros, 50.000 millones de euros para créditos urgentes, y 200.000 millones de euros de aval para crear hipotecas y volver a mover dinero y generar empleo.
Si se lo han dado a los banqueros con la falsedad de que llegaría al pueblo, y ahora constatamos que ese dinero no ha llegado al pueblo ni a las empresas, debemos exigir que repartan ese mismo dinero del pueblo entre el pueblo, y que utilice para ello a la Agencia Tributaria, que si bien es la encargada de la recaudación fiscal, también tramita hipotecas cuando se trata de aplazar deudas de una cierta cuantía, y tienen todos nuestros datos, cuentas bancarias, saldos, etc.
El debate no es izquierdas o derechas, el debate es preguntarse por qué los bancos deben tener el monopolio del crédito del dinero público, cuando lo más fácil sería que si el dinero es público, (de todos los españoles) y debe llegar a todos los españoles, lo más lógico es que la Agencia Tributaria reparta ese dinero entre las personas y empresas que lo soliciten, primero como crédito y luego 200.000 millones como hipotecas.
Querer es poder, solo falta tener voluntad política de hacerlo, además ahora que los bancos están en su mayoría quebrados, el crédito debe ser desde los españoles y para los españoles. ¿No somos todos la Agencia Tributaria?, pues que distribuya el dinero de todos; quitemos el monopolio a los bancos y hagamos realmente una política social y progresista.
No se trata de no trabajar con los bancos, seguiremos con ellos, pero el dinero público hay que repartirlo desde una entidad que nos represente a todos, no desde unas empresas privadas que nunca socializaron los beneficios y ahora pretenden y consiguen socializar las pérdidas.
Dar crédito es dar dinero, y nuestro tejido industrial necesita crédito urgente, se mueren como pez fuera del agua. Dar el dinero público a los banqueros en vez de al pueblo es indecente e inmoral.
300 páginas Din A-5
Publicado en abril del 2009
¿Cómo podemos superar la crisis y evitar sus efectos negativos?, pues fácil, exigiendo café para todos. Tenemos que exigir al gobierno de España como pueblo soberano que somos que reparta entre empresas y trabajadores la misma cantidad que les ha dado a los banqueros, 50.000 millones de euros para créditos urgentes, y 200.000 millones de euros de aval para crear hipotecas y volver a mover dinero y generar empleo.
Si se lo han dado a los banqueros con la falsedad de que llegaría al pueblo, y ahora constatamos que ese dinero no ha llegado al pueblo ni a las empresas, debemos exigir que repartan ese mismo dinero del pueblo entre el pueblo, y que utilice para ello a la Agencia Tributaria, que si bien es la encargada de la recaudación fiscal, también tramita hipotecas cuando se trata de aplazar deudas de una cierta cuantía, y tienen todos nuestros datos, cuentas bancarias, saldos, etc.
El debate no es izquierdas o derechas, el debate es preguntarse por qué los bancos deben tener el monopolio del crédito del dinero público, cuando lo más fácil sería que si el dinero es público, (de todos los españoles) y debe llegar a todos los españoles, lo más lógico es que la Agencia Tributaria reparta ese dinero entre las personas y empresas que lo soliciten, primero como crédito y luego 200.000 millones como hipotecas.
Querer es poder, solo falta tener voluntad política de hacerlo, además ahora que los bancos están en su mayoría quebrados, el crédito debe ser desde los españoles y para los españoles. ¿No somos todos la Agencia Tributaria?, pues que distribuya el dinero de todos; quitemos el monopolio a los bancos y hagamos realmente una política social y progresista.
No se trata de no trabajar con los bancos, seguiremos con ellos, pero el dinero público hay que repartirlo desde una entidad que nos represente a todos, no desde unas empresas privadas que nunca socializaron los beneficios y ahora pretenden y consiguen socializar las pérdidas.
Dar crédito es dar dinero, y nuestro tejido industrial necesita crédito urgente, se mueren como pez fuera del agua. Dar el dinero público a los banqueros en vez de al pueblo es indecente e inmoral.
300 páginas Din A-5