La familia “los raros” vive en calle La Cuesta y tiene un canguro como mascota, se llama Pelotazos, y no, no es un animal atlético ni da saltos, sino todo lo contrario; es aficionado a comer pizza todo el día y estar sentado. Roberto es el pequeño de la familia, un niño muy aplicado en la escuela al que los profesores quieren y valoran. Pero Roberto tiene un pequeño problemilla, se le da mal la Educación Física, sobretodo, el baloncesto. El tío Guille le encuentra una mañana muy triste frente a la canasta en el jardín de la casa y le pregunta por qué está llorando. Al enterarse del problemilla de su sobrino, decide ayudarlo. ¡Una pócima! ¡Ni más ni menos! Le da una pócima a Roberto que tendrá que tomar en cada desayuno. ¡Plátano, leche, azúcar y un saltamontes! De eso consta. ¡Sí!, ¡como habéis leído!, un saltamontes. El tío Guille promete a Roberto que cuando la tome será muy fuerte y una gran jugador de baloncesto.
Pero… ¿qué le sucederá a Roberto en realidad a partir de la mañana que decida tomar la pócima secreta? Adéntrate en la vida de esta divertida familia y verás que el desayuno puede convertirse en una loca aventura para los niños.