Hermógenes de Tarso fue la máxima autoridad en retórica de la segunda mitad del siglo II de nuestra era.
El retórico griego Hermógenes de Tarso, de la segunda mitad del siglo II y principios del III d.C., fue la máxima autoridad de su tiempo en la materia. Su obra principal es Sobre las formas del estilo, que analiza con tino y precisión las cualidades de varios autores, hasta determinar en qué consiste exactamente su estilo. A los tres tipos de oratoria canónicos (deliberativo, judicial y panegírico) añade en este tratado el político, combinación de los anteriores. Los cuatro se distinguen entre sí por sus diferentes grados de una serie de cualidades: claridad, carácter, sinceridad, riqueza de pensamiento, vehemencia, solemnidad, brillantez, fuerza, belleza. Gran conocedor de los discursos de Demóstenes y de los varios análisis retóricos de éstos, creía que todo el estudio de la retórica debía basarse en el gran orador ático. Fue asimismo autor de unos Ejercicios preparatorios para la retórica (que ocupan otro volumen de esta colección, junto a los ejercicios de los rétores Teón y Aftonio).