Fernando Pineda Ochoa construye una vida fincada en el compromiso político. Su relato se inicia con los recuerdos de su niñez, adolescencia y juventud. Se trata de una historia teñida de experiencias que nos muestran los pormenores y conflictos de la provincia mexicana. Van esclareciéndose así los problemas de una sociedad que se confronta consigo misma en el afán de encontrar soluciones a problemas ancestrales en medio de un orden político autoritario, lo que se expresa particularmente en los años cincuenta y sesenta. En las últimas dos partes el testimonio se vuelve una memoria histórica indisociable de la realidad social del país. De allí la exigencia de volver a ese periodo en que la lucha política reconocía su razón de ser y sus demandas en contraposición al régimen de la revolución burocratizada y de nulas realizaciones para afrontar los retos del desarrollo de México. Esta convicción conduce al autor hasta una cañada cerca de Pyongyang en cuya base militar habría de llevarse a cabo la preparación político-militar que juzgaba indispensable para alcanzar sus objetivos. Un relato que se entrelaza con experiencias guerrilleras semejantes que se produjeron durante esos años y que dan testimonio de las abiertas contradicciones sociales y políticas que han dado lugar a nuestra realidad actual.
Índice:
Agradecimientos
Prefacio
Introducción
I. Zirándaro (lugar de sirandas)
II. El Jardín de la Nueva España
III. AK–47
IV. Expediente 100/71
Epílogo. El valor del paradigma marxista
Apéndice fotográfico
Fuentes
Índice:
Agradecimientos
Prefacio
Introducción
I. Zirándaro (lugar de sirandas)
II. El Jardín de la Nueva España
III. AK–47
IV. Expediente 100/71
Epílogo. El valor del paradigma marxista
Apéndice fotográfico
Fuentes