Todo el bien que un padre puede hacerle a sus hijos, y todo lo que les pueda enseñar, nunca será bastante. Los hijos son la continuación de los padres, su vida, su alegría, sus inquietudes, sus esperanzas y hasta su inmortalidad. En este libro el autor abre su corazón de padre, de prójimo y de maestro, y lo pone al alcance no sólo de los jóvenes sino de los padres también.
Este libro que fue concebido en forma epistolar y escrito en renglones cortos como se estila en el verso, como una técnica y recurso de penetracion para los lectores jóvenes y adultos, ya que el autor abriga las mayores esperanzas en el cúmulo de reflexiones depositadas en él, puesto que abre nuevos horizontes a la juventud embolatada y a la humanidad en general, al tiempo que servirá para emprender un nuevo camino de ascenso y prosperidad espiritual, a la vez que le permitirá desenajenarse de un mundo y una actitud prosaica en donde se desperdicia la vida, que se valora como nada, como una vulgar mercancia o como sólo plusvalía para algunos explotadores, pero nunca se considera como un ente humano, y sobre todo espiritual, creado por el Hacedor para un destino supremo, no como un animal o vegetal sumidos en la esclavitud y en el rescoldo materialista.
Su destino es trascender a dimensiones superiores después de haber dominado los cuatro elementos, e incluso, alcanzar el don de la ubicuidad y la magia de navegar en las órbitas celestes, en vez de seguir entretenido como un niño grande, esclavizado de juguetes y de cosas.
De todas maneras, aunque el libro es muy completo, apenas es otro capítulo de mis libros anteriores como El Padre, El Sabio, El Hombre Sublime, El Filosofo, Manantial de Sabiduria y Aprendiz de Hombre, y que complemento con Carta a una Hija, El Maestro sin Aula, y la Juglarcita Amerindia, que están proximos a ser editados.
Luz y bondad, De discipulo a hombre, Hijo: Lo mejor para ti aprende a ser tu mismo, La música que no escuchas, Diseminación y perdición del hombre un problema de subcultura, El falso estudiante que se engaña a si mismo, Aprender las cosas por su nombre no es aprender, El poder de la voluntad, Voluntad en mente estrecha no sirve para nada, Ampliando la vision y el entendimiento, Amor y felicidad, Desarrollo de la personalidad.
Este libro que fue concebido en forma epistolar y escrito en renglones cortos como se estila en el verso, como una técnica y recurso de penetracion para los lectores jóvenes y adultos, ya que el autor abriga las mayores esperanzas en el cúmulo de reflexiones depositadas en él, puesto que abre nuevos horizontes a la juventud embolatada y a la humanidad en general, al tiempo que servirá para emprender un nuevo camino de ascenso y prosperidad espiritual, a la vez que le permitirá desenajenarse de un mundo y una actitud prosaica en donde se desperdicia la vida, que se valora como nada, como una vulgar mercancia o como sólo plusvalía para algunos explotadores, pero nunca se considera como un ente humano, y sobre todo espiritual, creado por el Hacedor para un destino supremo, no como un animal o vegetal sumidos en la esclavitud y en el rescoldo materialista.
Su destino es trascender a dimensiones superiores después de haber dominado los cuatro elementos, e incluso, alcanzar el don de la ubicuidad y la magia de navegar en las órbitas celestes, en vez de seguir entretenido como un niño grande, esclavizado de juguetes y de cosas.
De todas maneras, aunque el libro es muy completo, apenas es otro capítulo de mis libros anteriores como El Padre, El Sabio, El Hombre Sublime, El Filosofo, Manantial de Sabiduria y Aprendiz de Hombre, y que complemento con Carta a una Hija, El Maestro sin Aula, y la Juglarcita Amerindia, que están proximos a ser editados.
Luz y bondad, De discipulo a hombre, Hijo: Lo mejor para ti aprende a ser tu mismo, La música que no escuchas, Diseminación y perdición del hombre un problema de subcultura, El falso estudiante que se engaña a si mismo, Aprender las cosas por su nombre no es aprender, El poder de la voluntad, Voluntad en mente estrecha no sirve para nada, Ampliando la vision y el entendimiento, Amor y felicidad, Desarrollo de la personalidad.