Ecos de Tragicomedia

Si nos preguntáis a nosotros quién es Eliot no os podríamos contar nada extraordinario. Solo se trata de un habitante más del reino de Solaria, un hombre huérfano con una vida repleta de desgracias que a menudo es traicionado por su propia necedad. En cambio si le preguntáis a él os dirá que sus ambiciones superan a la de cualquiera de sus vulgares vecinos. Está a punto de emprender una odisea con un único objetivo: encontrar a su madre. Para ello sabe que necesitará dinero, ¡mucho dinero! Por este motivo se embarca en un viaje para ir en pos de la gloria y la fortuna que le permitirán cumplir su sueño, siempre y cuando logre dar esquinazo a un sinfín de peligros usando… ¿una espada de madera, su escasa fuerza física y su intelecto deficiente? Durante su periplo Eliot encontrará la ayuda que precisa para afrontar la adversidad y para enfrentarse a su propia naturaleza, forjada a partir del dolor de heridas aún sin cicatrizar. Mientras tanto irá descubriendo involuntariamente que el reino en el que vive es un lugar donde la muerte acecha por doquier, donde fuerzas oscuras conspiran para revivir un pasado infame y adonde se precipita desde las sombras una Tragedia, de la cual se irá convirtiendo sin saberlo en engranaje fundamental mediante sus necias acciones.