Escrito para lectores críticos, lectores rebeldes que no están dispuestos a ser domesticados y masificados por el pensamiento políticamente correcto. Pretende situar ante las cuestiones más importantes, no sólo de nuestro tiempo, sino, de todos los tiempos: El universo, la vida, el ser humano, Dios. De cómo se vivan estas cuestiones principales, así se pensarán y se vivirán las secundarias.
Así, por ejemplo, de las luces y sombras históricas del universo aparece la verdadera figura de Galileo, la trampa de Einstein sobre su ecuación cosmológica, la honradez científica de Lemaître, el humor seudo-bíblico de Gamow y cómo el nombre de Big Bang se lo puso un astrofísico que no creía en la explosión del universo.
Sobre la vida, aparecen el misterio de su esencia -¿qué es la vida?-, los que hoy la investigan y la defienden y los que la manipulan y explotan en provecho propio. Lo que la bioética correcta indica y la maravillosa obra de arte que la ciencia nos va mostrando sobre la vida humana desde su comienzo, con esos dos diálogos de amor entre el óvulo y el espermatozoide y entre el embrión con la mamá que lo anida dentro de su cuerpo.
Sobre los seres humanos se plantea toda la polémica sobre si el hombre es sólo el más evolucionado y cerebrizado de los animales o sobre si es algo muy distinto y superior al resto de los seres vivos. Se señala dónde está lo que realmente nos constituye en personas, en cuerpos espiritualizados o en espíritus corporizados.
En cuanto al espinoso y delicado asunto sobre ateísmo y creencia en la existencia de Dios, se muestran las distintas formas de ateísmo y los caminos que pueden llevar a Dios.
Así, por ejemplo, de las luces y sombras históricas del universo aparece la verdadera figura de Galileo, la trampa de Einstein sobre su ecuación cosmológica, la honradez científica de Lemaître, el humor seudo-bíblico de Gamow y cómo el nombre de Big Bang se lo puso un astrofísico que no creía en la explosión del universo.
Sobre la vida, aparecen el misterio de su esencia -¿qué es la vida?-, los que hoy la investigan y la defienden y los que la manipulan y explotan en provecho propio. Lo que la bioética correcta indica y la maravillosa obra de arte que la ciencia nos va mostrando sobre la vida humana desde su comienzo, con esos dos diálogos de amor entre el óvulo y el espermatozoide y entre el embrión con la mamá que lo anida dentro de su cuerpo.
Sobre los seres humanos se plantea toda la polémica sobre si el hombre es sólo el más evolucionado y cerebrizado de los animales o sobre si es algo muy distinto y superior al resto de los seres vivos. Se señala dónde está lo que realmente nos constituye en personas, en cuerpos espiritualizados o en espíritus corporizados.
En cuanto al espinoso y delicado asunto sobre ateísmo y creencia en la existencia de Dios, se muestran las distintas formas de ateísmo y los caminos que pueden llevar a Dios.