En el siglo XXV, la humanidad ha alcanzado la inmortalidad gracias al agua viva, el agua vital que se reparte de manera gratuita entre la población de la Europa Unida. La muerte ya no existe, pero la superpoblación ha convertido en limitados algunos recursos, como el aire y el espacio.
En dicho mundo, cuando una persona quiere tener un hijo debe administrarse una inyección de vejez para morir y dejar lugar a su sucesor. Naturalmente, hay quien intenta tener hijos de manera clandestina y conservar la inmortalidad. La Falange es la organización policial encargada de perseguir a estos disidentes.
Yan es uno de los Inmortales, como también se conoce a los miembros de la Falange. Un día recibe un singular encargo: asesinar al número dos de una formación política clandestina que lucha por el derecho de los ciudadanos a tener hijos libremente.
En dicho mundo, cuando una persona quiere tener un hijo debe administrarse una inyección de vejez para morir y dejar lugar a su sucesor. Naturalmente, hay quien intenta tener hijos de manera clandestina y conservar la inmortalidad. La Falange es la organización policial encargada de perseguir a estos disidentes.
Yan es uno de los Inmortales, como también se conoce a los miembros de la Falange. Un día recibe un singular encargo: asesinar al número dos de una formación política clandestina que lucha por el derecho de los ciudadanos a tener hijos libremente.