La India es mentira. Pienso en ella y la recuerdo como se recuerda a una amante apasionada y traicionera al mismo tiempo, como se añora a la mujer de la que uno se enamoró, cuyos rasgos, aún hermosos, son hoy lo único apenas reconocible, porque su corazón ni a ella misma le pertenece. La memoria es contradictoria, caprichosa y cruel. Nada queda de aquella muchacha de oscuro exotismo que prendó a los novelistas del diecinueve. Lejos se antojan ya los días de las maravillas y la belleza, de las alfombras y las lámparas, de los grandes reyes y los fastos, de los elefantes y los tigres, de las flores y los vinos de juventud. Ahora el espejo de nuestros ojos sólo devuelve una imagen irreal, extemporánea, nimbada por mitos románticos y coloniales cuyas ruinas se pudren bajo el maquillaje, los abalorios y una mirada perfilada de khol y misterio, hueca, vacía.
Imposible es describir el país de mayores contrastes y polaridades que el mundo haya conocido en un prólogo de unos cuantos párrafos. Eso fue lo que me alentó a escribir este libro, que está basado en el cuaderno de viaje que con tanta disciplina y sacrificio fui escribiendo entre dunas, polvo, moscas, selvas, mosquitos, tormentas, lluvia y nieve, arrumbado en el suelo de los trenes, encaramado a la baca de los autobuses, de autoestop en motocicletas y camiones, en pequeños rickshaws y en jeeps que ascendían a toda velocidad tortuosas laderas de montañas al arrimo de carreteruchas sin quitamiedos.
En dos meses recorrí la India de arriba abajo. Pero sesenta días no dan para comprender un país tan dispar como la India, aunque sí permiten hacerse una idea cercana. Sin embargo la visión que uno traiga consigo del país diferirá inevitablemente con la que otro haya experimentado. Por eso sostengo que no hay una sola manera de mirar la India. Por eso la India es una experiencia interior, íntima y personal.
Es ése el motivo por el que todo lo vertido en este libro es mentira. Pero es mi mentira. Y es en estas páginas donde expongo lo que yo vi, lo que yo oí, lo que yo sentí, lo que yo hice y lo que ocurrió a mi alrededor tal como yo lo percibí. Ésta es mi versión, sólo la mía, y es aquí donde la cuento.
«El autor de Las ciudades de la luz es un escritor de raza, de cuerpo entero y de claro futuro [...]. Sus páginas están escritas con extrema pulcritud gramatical, sólido pulso narrativo, autoridad filosófica y exquisito gusto literario [...]. Me di cuenta enseguida de que Javier Redondo Jordán era un anacronismo, era de lo que ya no hay, era un superviviente llegado de épocas remotas e infinitamente superiores a las actuales, y era, por encima de cualquier otra consideración, un individuo lanzado a la aventura de la vida por el camino de la ilustración y adornado por toda suerte de atributos morales, emocionales, culturales e intelectuales.»
(Extracto del prólogo de Fernando Sánchez Dragó)
«[Javier Redondo Jordán] Nos va narrando las innumerables imágenes que traspasan sus antiparras y pasan a ser analizadas emocional y racionalmente. No se escapa matiz, no se olvida arista estructural de la composición; es la cuidada tarea de un hombre atribulado por comprender la vida, el mundo y, sobre todo, a sí mismo.»
Demián, http://viajeanada.blogspot.com.es
Javier Redondo Jordán es escritor, director de la revista cultural Avuelapluma.com y creador de los Encuentros Eleusinos, unos cursos de pensamiento y literatura en los que han participado importantes figuras intelectuales. Colabora en publicaciones que abarcan temáticas como la crítica literaria y los viajes. En 2007 viajó a la India, y fruto de aquellos dos meses de errabundaje nacieron varios libros de viajes, publicados en papel y en Amazon: Las ciudades de la luz, Sombras en la retina, Rajastán y Benarés.
www.redondojordan.com
Imposible es describir el país de mayores contrastes y polaridades que el mundo haya conocido en un prólogo de unos cuantos párrafos. Eso fue lo que me alentó a escribir este libro, que está basado en el cuaderno de viaje que con tanta disciplina y sacrificio fui escribiendo entre dunas, polvo, moscas, selvas, mosquitos, tormentas, lluvia y nieve, arrumbado en el suelo de los trenes, encaramado a la baca de los autobuses, de autoestop en motocicletas y camiones, en pequeños rickshaws y en jeeps que ascendían a toda velocidad tortuosas laderas de montañas al arrimo de carreteruchas sin quitamiedos.
En dos meses recorrí la India de arriba abajo. Pero sesenta días no dan para comprender un país tan dispar como la India, aunque sí permiten hacerse una idea cercana. Sin embargo la visión que uno traiga consigo del país diferirá inevitablemente con la que otro haya experimentado. Por eso sostengo que no hay una sola manera de mirar la India. Por eso la India es una experiencia interior, íntima y personal.
Es ése el motivo por el que todo lo vertido en este libro es mentira. Pero es mi mentira. Y es en estas páginas donde expongo lo que yo vi, lo que yo oí, lo que yo sentí, lo que yo hice y lo que ocurrió a mi alrededor tal como yo lo percibí. Ésta es mi versión, sólo la mía, y es aquí donde la cuento.
Críticas
«El autor de Las ciudades de la luz es un escritor de raza, de cuerpo entero y de claro futuro [...]. Sus páginas están escritas con extrema pulcritud gramatical, sólido pulso narrativo, autoridad filosófica y exquisito gusto literario [...]. Me di cuenta enseguida de que Javier Redondo Jordán era un anacronismo, era de lo que ya no hay, era un superviviente llegado de épocas remotas e infinitamente superiores a las actuales, y era, por encima de cualquier otra consideración, un individuo lanzado a la aventura de la vida por el camino de la ilustración y adornado por toda suerte de atributos morales, emocionales, culturales e intelectuales.»
(Extracto del prólogo de Fernando Sánchez Dragó)
«[Javier Redondo Jordán] Nos va narrando las innumerables imágenes que traspasan sus antiparras y pasan a ser analizadas emocional y racionalmente. No se escapa matiz, no se olvida arista estructural de la composición; es la cuidada tarea de un hombre atribulado por comprender la vida, el mundo y, sobre todo, a sí mismo.»
Demián, http://viajeanada.blogspot.com.es
Biografía del autor
Javier Redondo Jordán es escritor, director de la revista cultural Avuelapluma.com y creador de los Encuentros Eleusinos, unos cursos de pensamiento y literatura en los que han participado importantes figuras intelectuales. Colabora en publicaciones que abarcan temáticas como la crítica literaria y los viajes. En 2007 viajó a la India, y fruto de aquellos dos meses de errabundaje nacieron varios libros de viajes, publicados en papel y en Amazon: Las ciudades de la luz, Sombras en la retina, Rajastán y Benarés.
www.redondojordan.com