¿Puede alguien enmendar sus errores después de muerto?
Rufus, un viejo pirata disfrazado de zapatero, escribe un diario al final de su vida. Ha dejado varios capítulos sin cerrar: un pasado sanguinario del que se arrepiente, una historia de amor interrumpida, una nieta perdida en algún lugar de Arabia y un tesoro enterrado en una isla desconocida del mar de Bengala. Cuando lega sus posesiones más preciadas a Pedro, el hijo de un simple pescador, está planificando su última aventura, la que llevará al muchacho en la segunda mitad del siglo XIX hasta la India, para enfrentarse a los fantasmas del pasado de Rufus.
SINOPSIS:
Golfo de Cádiz, mil ochocientos cincuenta y tantos. Pedro contempla desde la playa junto a su madre y sus hermanos el naufragio del barco en el que va su padre. Llora, pero no se rinde. En lugar de tirar la toalla, se mueve, busca ayuda y aguanta sin pestañear la mirada aguda del único ojo sano del zapatero: de ese Rufus al que todos apodan «el pirata», con su rostro marcado por una aterradora cicatriz, su parche en el ojo izquierdo y ese cristal, ese extraño cristal verde colgado sobre el parche de tal forma que parece un segundo ojo siempre abierto, siempre vigilante. Pedro siente miedo. Echaría a correr… de no ser porque aquel hombre parece el único dispuesto a ir al rescate de su padre.
El chico acaba de entrar en el mundo del pirata, con sus historias de bucaneros y corsarios, sus mares exóticos, sus veloces barcos veleros y sus tesoros perdidos en islas misteriosas que no figuran en los mapas… Pero eso, Pedro aún no lo sabe. Ni siquiera lo adivina cuando el zapatero muere unos meses más tarde y le deja en herencia el enigmático cristal. Tres años después, cuando el joven ya casi ha olvidado sus sueños de niño, recibe la visita de dos comerciantes portugueses, antiguos amigos de Rufus, que le ofrecen participar en una expedición a la India.
Poco a poco, Pedro percibe que es él quién debe llevar a buen fin la última aventura del pirata: rescatar a su nieta y hallar el tesoro. Para conseguirlo, necesita descifrar antes las pistas escondidas en los objetos que Rufus le legó: el cristal, el diario, un cofre lleno de cartas de amor… Tanto en el barco velero en el que navega como en la India, encuentra amigos dispuestos a echarle una mano pero, para su desgracia, descubre que no todos son de fiar. ¿Será demasiado tarde para alcanzar la isla antes que ellos? ¿Y si lo logra, podrá evitar que le maten? Y… ¿de verdad hay un tesoro, o todo es una gran broma de Locke, ese astuto capitán pirata inglés al que conoció Rufus?
RESEÑAS:
Ariodante en Melibro.com:
“…«El cristal y la perla», ópera prima de Maria Tordera…contiene todos los ingredientes de una novela de aventuras: entretiene, hace que entremos en un mundo imaginario y que nos lancemos, junto a los protagonistas, en la búsqueda del rastro de un pirata que no lo fue siempre”.
…
“La última parte del libro y el desenlace de la historia es de una creciente acción y fuerte tensión…”
Fanfiction.es:
"Una original historia en la que los piratas no son necesariamente malos, pero tampoco buenos, en la que más que lo que la gente es cuenta lo que hace y como lo hace y dónde nuestros jóvenes pueden aprender el valor de la amistad y la lealtad".
...una lectura más profunda nos invita a pensar y comparar nuestra vida con la de los personajes, principales pero sobre todo secundarios, y nos permite ver que cambiar está a nuestro alcance, pero solo si queremos...
Si lo que has leído hasta ahora te atrae, desplaza la pantalla hacia arriba, haz click en «Enviar fragmento ya» a tu dispositivo y sigue leyendo.
Rufus, un viejo pirata disfrazado de zapatero, escribe un diario al final de su vida. Ha dejado varios capítulos sin cerrar: un pasado sanguinario del que se arrepiente, una historia de amor interrumpida, una nieta perdida en algún lugar de Arabia y un tesoro enterrado en una isla desconocida del mar de Bengala. Cuando lega sus posesiones más preciadas a Pedro, el hijo de un simple pescador, está planificando su última aventura, la que llevará al muchacho en la segunda mitad del siglo XIX hasta la India, para enfrentarse a los fantasmas del pasado de Rufus.
SINOPSIS:
Golfo de Cádiz, mil ochocientos cincuenta y tantos. Pedro contempla desde la playa junto a su madre y sus hermanos el naufragio del barco en el que va su padre. Llora, pero no se rinde. En lugar de tirar la toalla, se mueve, busca ayuda y aguanta sin pestañear la mirada aguda del único ojo sano del zapatero: de ese Rufus al que todos apodan «el pirata», con su rostro marcado por una aterradora cicatriz, su parche en el ojo izquierdo y ese cristal, ese extraño cristal verde colgado sobre el parche de tal forma que parece un segundo ojo siempre abierto, siempre vigilante. Pedro siente miedo. Echaría a correr… de no ser porque aquel hombre parece el único dispuesto a ir al rescate de su padre.
El chico acaba de entrar en el mundo del pirata, con sus historias de bucaneros y corsarios, sus mares exóticos, sus veloces barcos veleros y sus tesoros perdidos en islas misteriosas que no figuran en los mapas… Pero eso, Pedro aún no lo sabe. Ni siquiera lo adivina cuando el zapatero muere unos meses más tarde y le deja en herencia el enigmático cristal. Tres años después, cuando el joven ya casi ha olvidado sus sueños de niño, recibe la visita de dos comerciantes portugueses, antiguos amigos de Rufus, que le ofrecen participar en una expedición a la India.
Poco a poco, Pedro percibe que es él quién debe llevar a buen fin la última aventura del pirata: rescatar a su nieta y hallar el tesoro. Para conseguirlo, necesita descifrar antes las pistas escondidas en los objetos que Rufus le legó: el cristal, el diario, un cofre lleno de cartas de amor… Tanto en el barco velero en el que navega como en la India, encuentra amigos dispuestos a echarle una mano pero, para su desgracia, descubre que no todos son de fiar. ¿Será demasiado tarde para alcanzar la isla antes que ellos? ¿Y si lo logra, podrá evitar que le maten? Y… ¿de verdad hay un tesoro, o todo es una gran broma de Locke, ese astuto capitán pirata inglés al que conoció Rufus?
RESEÑAS:
Ariodante en Melibro.com:
“…«El cristal y la perla», ópera prima de Maria Tordera…contiene todos los ingredientes de una novela de aventuras: entretiene, hace que entremos en un mundo imaginario y que nos lancemos, junto a los protagonistas, en la búsqueda del rastro de un pirata que no lo fue siempre”.
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“La última parte del libro y el desenlace de la historia es de una creciente acción y fuerte tensión…”
Fanfiction.es:
"Una original historia en la que los piratas no son necesariamente malos, pero tampoco buenos, en la que más que lo que la gente es cuenta lo que hace y como lo hace y dónde nuestros jóvenes pueden aprender el valor de la amistad y la lealtad".
...una lectura más profunda nos invita a pensar y comparar nuestra vida con la de los personajes, principales pero sobre todo secundarios, y nos permite ver que cambiar está a nuestro alcance, pero solo si queremos...
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