No nos engañemos, tener datos no nos aporta beneficios.
Porque creer que recoger datos es suficiente para ganar dinero, es como creer que con comprarnos una báscula, pesarnos diariamente y llevar un registro de nuestro peso será suficiente para adelgazar.
Oímos a menudo hablar de Big Data. Y, a pesar de todas las inversiones realizadas, muchas organizaciones se sienten frustradas por la incapacidad de capitalizar su valor.
Data Coaching ayuda a las organizaciones a extraer el valor económico de los datos, profundizando en todos los niveles de la empresa en la cultura de datos, en la cultura de negocio y en la cultura ágil.
Data Coaching es un libro breve, divertido y con sustancia. Se lee en dos horas, pasas un buen rato y aprendes un montón de lecciones prácticas tomadas de la propia experiencia de más de 20 años de trabajo como consultor de negocio y analista digital del autor.
Esto lo tengo claro. Las personas que trabajan con datos (sistemas de información, analistas y científicos de datos) carecen a menudo de formación en negocio y no son suficientemente conscientes de que lo que debe dirigir su trabajo es precisamente la búsqueda de valor económico. Y, cuando encuentran algo, no son capaces de evaluar el auténtico beneficio de sus descubrimientos en términos económicos. Así que comunican lo que han descubierto con su jerga incomprensible. Sus informes, a menudo, se quedan durmiendo en alguna estantería, sin que nadie lo convierta en acción y en dinero.
Al otro lado, los que toman las decisiones de negocio (dirección, marketing, ventas, desarrolladores de producto …), no conocen el lenguaje de los datos, no están alfabetizados y no pueden aprovechar el conocimiento que les llega del lado de los datos.
Como vemos, es fundamentalmente un problema de personas y de culturas que habitan en silos estancos (la cultura de negocio y la cultura de datos).
Es como un gran abismo que se abre entre datos y negocio, y les impide comunicarse adecuadamente. Y el resultado es que el valor se precipita en esa fosa y no llega a materializarse.
Para solucionar este problema, Data Coaching se ocupa de enseñar a las organizaciones a extraer el máximo **beneficio económico** de los datos. Y lo hace de un modo muy simple: acercando a la gente de datos a la cultura del negocio y a la gente de negocio a la cultura de datos.
Porque creer que recoger datos es suficiente para ganar dinero, es como creer que con comprarnos una báscula, pesarnos diariamente y llevar un registro de nuestro peso será suficiente para adelgazar.
Oímos a menudo hablar de Big Data. Y, a pesar de todas las inversiones realizadas, muchas organizaciones se sienten frustradas por la incapacidad de capitalizar su valor.
Data Coaching ayuda a las organizaciones a extraer el valor económico de los datos, profundizando en todos los niveles de la empresa en la cultura de datos, en la cultura de negocio y en la cultura ágil.
Data Coaching es un libro breve, divertido y con sustancia. Se lee en dos horas, pasas un buen rato y aprendes un montón de lecciones prácticas tomadas de la propia experiencia de más de 20 años de trabajo como consultor de negocio y analista digital del autor.
Esto lo tengo claro. Las personas que trabajan con datos (sistemas de información, analistas y científicos de datos) carecen a menudo de formación en negocio y no son suficientemente conscientes de que lo que debe dirigir su trabajo es precisamente la búsqueda de valor económico. Y, cuando encuentran algo, no son capaces de evaluar el auténtico beneficio de sus descubrimientos en términos económicos. Así que comunican lo que han descubierto con su jerga incomprensible. Sus informes, a menudo, se quedan durmiendo en alguna estantería, sin que nadie lo convierta en acción y en dinero.
Al otro lado, los que toman las decisiones de negocio (dirección, marketing, ventas, desarrolladores de producto …), no conocen el lenguaje de los datos, no están alfabetizados y no pueden aprovechar el conocimiento que les llega del lado de los datos.
Como vemos, es fundamentalmente un problema de personas y de culturas que habitan en silos estancos (la cultura de negocio y la cultura de datos).
Es como un gran abismo que se abre entre datos y negocio, y les impide comunicarse adecuadamente. Y el resultado es que el valor se precipita en esa fosa y no llega a materializarse.
Para solucionar este problema, Data Coaching se ocupa de enseñar a las organizaciones a extraer el máximo **beneficio económico** de los datos. Y lo hace de un modo muy simple: acercando a la gente de datos a la cultura del negocio y a la gente de negocio a la cultura de datos.