“DESCENDIENTE PARA EL HEREDERO DEL JEQUE” es la última publicación del autor superventas internacional Alex Anders y es para aquellos a quienes les encantan las pequeñas historias de amor en las que vírgenes inocentes son corrompidas por poderosos machos alfa que exigen sumisión y que disfrutan del BDSM.
Emma Cole era aventurera para todo excepto para el sexo. Pero cuando llega a Dubai y conoce al atractivo desconocido de cabello ondulado y ojos como el chocolate con leche, su cuerpo acalorado grita desesperadamente por él. Cuando es cautivada por su potente dominación sexual, él exige sumisión completa. Y a miles de kilómetros de casa, Emma debe decidir si rendirse o arriesgarse al castigo del macho alfa cuya voluntad va consumiendo lentamente la suya propia.
8000 palabras.
*Tenga en cuenta que esta historia contiene situaciones eróticas y sexuales descritas de forma elegante únicamente para lectores adultos.
Extracto:
Emma abrió de golpe la puerta del baño. Para su desconcierto, se encuentra de frente a un hombre cruzado de brazos. Era él. Había venido buscándola. Ahora confrontada por la realidad de tenerlo frente a ella, el miedo le recorrió como una onda de calor. Emma retrocedió tropezando hacia dentro del baño.
El hombre de mirada férrea se acercó amenazadoramente como quien acosa una presa. Emma reculó como un conejo asustado. Su corazón latía violentamente y su cuerpo se estremecía de la excitación. Acorralada contra la pared, levantó la cabeza para mirar la cara del hombre. Sus rodillas temblaban amenazando con ceder, y cuando la enorme mano del hombre envolvió su pequeña cintura, parecía una muñeca de trapo en su intenso abrazo.
El hombre atrajo el cuerpo de Emma hacia el suyo. Extasiada por su cara, examinó su cuerpo para determinar qué estaba ocurriendo. Presionada contra su estómago, notó lo que tenía que ser su p***a endurecida. Al pensarlo, se le entrecortó el aliento y la sangre le subió de pronto a la cara. Se sintió mareada incluso cuando anhelaba explorar más su grandiosidad.
Aturdida, Emma se estiró para alcanzar su boca. Quería que él le consumiera y lo único en lo que podía pensar su mente inocente era en su beso. Todo dentro de ella reclamaba que besara al desconocido, y deslizando su cuerpo junto al de él, cerró sus ojos esperando que él se inclinara hacia ella.
“No,” dijo el hombre en una voz que sonó lejanamente familiar al hombre de su sueño.
Emma abrió los ojos sorprendida por su contestación. Buscando su cara para obtener una respuesta, aspiró bruscamente cuando de repente él le levantó la falda y le agarró el c**o con su mano libre. Desprevenida, la sensación le atravesó el cuerpo y le explotó en la cabeza. Nunca antes le habían tocado ahí. La sensación era abrumadora. Inmediatamente, ella quiso más.
Emma Cole era aventurera para todo excepto para el sexo. Pero cuando llega a Dubai y conoce al atractivo desconocido de cabello ondulado y ojos como el chocolate con leche, su cuerpo acalorado grita desesperadamente por él. Cuando es cautivada por su potente dominación sexual, él exige sumisión completa. Y a miles de kilómetros de casa, Emma debe decidir si rendirse o arriesgarse al castigo del macho alfa cuya voluntad va consumiendo lentamente la suya propia.
8000 palabras.
*Tenga en cuenta que esta historia contiene situaciones eróticas y sexuales descritas de forma elegante únicamente para lectores adultos.
Extracto:
Emma abrió de golpe la puerta del baño. Para su desconcierto, se encuentra de frente a un hombre cruzado de brazos. Era él. Había venido buscándola. Ahora confrontada por la realidad de tenerlo frente a ella, el miedo le recorrió como una onda de calor. Emma retrocedió tropezando hacia dentro del baño.
El hombre de mirada férrea se acercó amenazadoramente como quien acosa una presa. Emma reculó como un conejo asustado. Su corazón latía violentamente y su cuerpo se estremecía de la excitación. Acorralada contra la pared, levantó la cabeza para mirar la cara del hombre. Sus rodillas temblaban amenazando con ceder, y cuando la enorme mano del hombre envolvió su pequeña cintura, parecía una muñeca de trapo en su intenso abrazo.
El hombre atrajo el cuerpo de Emma hacia el suyo. Extasiada por su cara, examinó su cuerpo para determinar qué estaba ocurriendo. Presionada contra su estómago, notó lo que tenía que ser su p***a endurecida. Al pensarlo, se le entrecortó el aliento y la sangre le subió de pronto a la cara. Se sintió mareada incluso cuando anhelaba explorar más su grandiosidad.
Aturdida, Emma se estiró para alcanzar su boca. Quería que él le consumiera y lo único en lo que podía pensar su mente inocente era en su beso. Todo dentro de ella reclamaba que besara al desconocido, y deslizando su cuerpo junto al de él, cerró sus ojos esperando que él se inclinara hacia ella.
“No,” dijo el hombre en una voz que sonó lejanamente familiar al hombre de su sueño.
Emma abrió los ojos sorprendida por su contestación. Buscando su cara para obtener una respuesta, aspiró bruscamente cuando de repente él le levantó la falda y le agarró el c**o con su mano libre. Desprevenida, la sensación le atravesó el cuerpo y le explotó en la cabeza. Nunca antes le habían tocado ahí. La sensación era abrumadora. Inmediatamente, ella quiso más.