Una novedosa visión de la vida de Isabel II, una mujer adelantada a su tiempo. Una autobiografía novelada que, con humor, erotismo y rigor histórico, desvela sus secretos más íntimos.
Ésta es la historia de una reina que hizo del amor su oficio, y que vivió por y para el goce. La historia de un mal de la piel que ha de ocultarse, de una pasión prohibida, de un informe que todos quieren poseer; la nómina de los amantes y las intrigas de un siglo que acaba por perderse en sus recovecos y se ve obligado a ceder ante la avalancha del tiempo, igual que los lienzos en favor de la fotografía. Lascivia y política: el final de una España, entre revoluciones de fuera que se ven venir y otras más íntimas, más intensas e insólitas, que vienen sin esperarlas.
Ésta es la historia de Isabel, que reinó sin gobernar, contada en primera persona. De la mujer contradictoria y poderosa que gustaba de almorzar escamitas resecas de hombre. Entre el erotismo de Anaïs Nin y la irreverente pirotecnia verbal de Valle-Inclán, la voz narradora lleva al lector en un apasionante viaje por una obra ambiciosa, sexual y rotunda.
Con todas las urgencias de adentro del cuerpo que no se le consienten a una hembra, y menos a una soberana, me volví una mujer serpiente. Podría entonces haberme matado con una cocción de fósforo; sin embargo, no me di al suicidio. Yo, doña Isabel II de España, me di. A todo y a todos.
De resultas de ello, en la Prefectura de Policía de París llegó a guardarse un cartapacio con el detalle preciso del número y nombre de mis amantes. Muy a mi pesar, sobraban peces. A más que faltaban, y no dos ni tres, tiburones muy malos.
Hombres.
Me han hecho pasar las de Caín, con haberlos amado tanto.
Reseñas:
«Una novela que juega con el erotismoy con la historia, contada con picardía y sin dejarse nada en el tintero. [...] Una historia diferente para los que buscan la típica novela erótica y una sorpresa para los amantes del género histórico. ¿Alguien da más?»
Sarah Manzano en Papel en blanco
«Interesante autobiografía ficcionada que sorprende, engancha y abre la novela histórica al erotismo y el deseo.»
Mía
«El sorprendente debut como novelista de la sevillana Soledad Galán.»
Alejandro Luque, El Correo de Andalucía