Un joven de 19 años viajando a casa en el último tren se encuentra a si mismo sentado en un carruaje sólo, con una ligeramente tomada y cachonda mujer madura la cual acababa de disfrutar una noche fuera. Cuando la mujer descubre que es un virgen decide divertirse un poco dándole una mamada y luego dejándolo follarla.
Este es un corto relato explicito erótico de aproximadamente 5,000 palabras. Contiene lenguaje gráfico y temas sexuales. Está dirigido únicamente a adultos que estén interesados en este tipo de material para ser visto en jurisdicciones donde su venta y disfrute no violen ninguna ley local.
Extracto:
“¿Puedo lamerla primero?” preguntó.
La mujer lo miraba con una sonrisa en su rostro. “Hazlo,” dijo y gimió mientras Steve se doblaba hacia adelante para rozar sus labios contra la mojada vulva, el sabor llenó su boca y de pronto se encontraba besando con fuerza y moviendo su lengua rápidamente para lamer la humedad. “Oh joder, hazlo mas fuerte,” exigió la mujer. Llevó sus dedos sobre su abertura y jalo la piel exponiendo su erecto clítoris. Steve rápidamente lamió a lo largo de los labios vaginales y movió su lengua rápidamente sobre el pequeño y endurecido punto. Las caderas de la mujer saltaron hacia él al sentir el placer de su clítoris siendo jugueteado recorriendo su cuerpo. De pronto se encontraba suplicándole que lo hiciera con más fuerza, lo tomo del cuello por la parte de atrás y jalo su boca hacia ella. Él continuó lamiendo con fuerza el clítoris, su pulso acelerándose más y más a medida que la mujer gemía y empujaba sus caderas hacia él. Por fin retrocedió un poco y lamió nuevamente sobre los mojados labios vaginales. Steve empujó con fuerza contra ellos y sintió el mojado agujero abriéndose. Retrocedió un poco para mirar a la mujer deslizando sus manos en ambos lados de su abertura rosa.
Este es un corto relato explicito erótico de aproximadamente 5,000 palabras. Contiene lenguaje gráfico y temas sexuales. Está dirigido únicamente a adultos que estén interesados en este tipo de material para ser visto en jurisdicciones donde su venta y disfrute no violen ninguna ley local.
Extracto:
“¿Puedo lamerla primero?” preguntó.
La mujer lo miraba con una sonrisa en su rostro. “Hazlo,” dijo y gimió mientras Steve se doblaba hacia adelante para rozar sus labios contra la mojada vulva, el sabor llenó su boca y de pronto se encontraba besando con fuerza y moviendo su lengua rápidamente para lamer la humedad. “Oh joder, hazlo mas fuerte,” exigió la mujer. Llevó sus dedos sobre su abertura y jalo la piel exponiendo su erecto clítoris. Steve rápidamente lamió a lo largo de los labios vaginales y movió su lengua rápidamente sobre el pequeño y endurecido punto. Las caderas de la mujer saltaron hacia él al sentir el placer de su clítoris siendo jugueteado recorriendo su cuerpo. De pronto se encontraba suplicándole que lo hiciera con más fuerza, lo tomo del cuello por la parte de atrás y jalo su boca hacia ella. Él continuó lamiendo con fuerza el clítoris, su pulso acelerándose más y más a medida que la mujer gemía y empujaba sus caderas hacia él. Por fin retrocedió un poco y lamió nuevamente sobre los mojados labios vaginales. Steve empujó con fuerza contra ellos y sintió el mojado agujero abriéndose. Retrocedió un poco para mirar a la mujer deslizando sus manos en ambos lados de su abertura rosa.