Jessica es la jefa de Steven, aunque no podrías notarlo por la forma en la que él actúa frente a ella. Él es un rebelde sin vergüenza, y aunque sea devastadoramente apuesto y la haga imaginarse desnuda en sus brazos, su actitud la enfurece. Una vez que ella descubra que los deseos de Steven hacia ella están más allá de lo ordinario, ¿lo mantendrá a distancia o será incapaz de hacer algo aparte de rogarle por más?
Esta es una historia explícita erótica corta, de aproximadamente 5.100 palabras. Contiene lenguaje gráfico y temas sexuales. Está dirigida sólo para adultos que estén interesados en este tipo de material para su consumo en jurisdicciones donde su venta y disfrute no viola leyes locales.
Extracto:
“Si”, ella trató de mantener calmada su voz, sus ojos se clavaron en los de él, incapaz de apartarlos. “Eso es inapropiado para el trabajo, de hecho”
Su mano siguió moviéndose en su búsqueda de probar cuán pequeño era el poder que ella tenía allí, y sus dedos se juntaron para desabotonar el broche en su cuello mientras él susurraba “Mira cuán inapropiado estoy siendo, Jessica”.
Ella difícilmente podía respirar, y peleó por mantener sus ojos abiertos, quería tanto cerrarlos y rendirse y ya estaba completamente bajo el control de él, “Es Señorita Kaplan”, balbuceó, sus palabras se separaron por su temblorosa respiración.
Esta es una historia explícita erótica corta, de aproximadamente 5.100 palabras. Contiene lenguaje gráfico y temas sexuales. Está dirigida sólo para adultos que estén interesados en este tipo de material para su consumo en jurisdicciones donde su venta y disfrute no viola leyes locales.
Extracto:
“Si”, ella trató de mantener calmada su voz, sus ojos se clavaron en los de él, incapaz de apartarlos. “Eso es inapropiado para el trabajo, de hecho”
Su mano siguió moviéndose en su búsqueda de probar cuán pequeño era el poder que ella tenía allí, y sus dedos se juntaron para desabotonar el broche en su cuello mientras él susurraba “Mira cuán inapropiado estoy siendo, Jessica”.
Ella difícilmente podía respirar, y peleó por mantener sus ojos abiertos, quería tanto cerrarlos y rendirse y ya estaba completamente bajo el control de él, “Es Señorita Kaplan”, balbuceó, sus palabras se separaron por su temblorosa respiración.