Año 1614, en el puerto de Sanlúcar de Barrameda atraca un barco con unos exóticos pasajeros: una delegación de veintidós samuráis que comenzaban en el puerto español su visita a Europa. Habían tardado casi un año en hacer el largo viaje desde el lejano y hermético Japón, y nada les había preparado para el tremendo choque cultural que les aguardaba.
El protagonista de esta novela ―en la que John J. Healey mezcla de forma magistral la realidad de aquel viaje con la ficción― es el samurái Shiro, quien logra trabar amistad con el duque de Medina Sidonia y llega a ganarse el apoyo del rey Felipe III y del duque de Lerma. Shiro, sabio y mesurado en cuestiones diplomáticas, sin embargo no logrará evitar enamorarse de una joven sevillana malcasada con un aristócrata de poco fiar. Esta apasionada relación le obligará a combatir no pocos peligros y los obstáculos impuestos por los prejuicios y las normas de la sociedad sevillana del siglo XVII.