En la isla de Boriquén (futura isla de Puerto Rico) una niña taína presagia la llegada de forasteros de extraño semblante hasta las playas, lo que se volvería realidad en 1508. Poco después, el hermano menor del jefe indígena mayor de la isla observa la partida del jefe de los forasteros, Juan Ponce de León, y queda convencido de que “los dioses venidos del bagua” no son tales, sino mortales empeñados en sojuzgar a su pueblo…
Un relato realista, lleno de vivencias, donde el autor nos revela la esencia del entramado socio-psicológico del descubrimiento de América. Una visión serena que se aleja de los manidos postulados épicos y de las revisiones históricas carentes de fundamento.
Un relato realista, lleno de vivencias, donde el autor nos revela la esencia del entramado socio-psicológico del descubrimiento de América. Una visión serena que se aleja de los manidos postulados épicos y de las revisiones históricas carentes de fundamento.