Un alud, un escape. Durante unas vacaciones escolares, cuatro chicos de 12 años quedan separados de su grupo en un bosque desconocido. En esta situación extrema cada uno dejará ver su verdadero ser interior, el adulto que será el día de mañana. Y uno de ellos, sólo uno de ellos, será capaz de convertirse en un superhéroe.
La serie "Superhéroe" no habla de niños mágicos, ni de bebés con poderes especiales, ni de seres elegidos por los dioses; no habla de ese tipo de héroes destinados a serlo más allá de sus acciones; no habla de esos héroes rodeados de ayudantes que se ven forzados a poner toda su fuerza y su astucia -muchas veces superior a las del "elegido"- para ayudar al predestinado a convertirse en el héroe que debe ser.
Esta serie ha sido concebida de manera opuesta. Sin privilegiados. Aquí se cuenta el proceso del nacimiento de un superhéroe, cuenta cómo un niño normal y corriente, por sus propias acciones, por sus hazañas, se convertirá en un ser superdotado. No porque esté especialmente destinado a ello sino por sus propias virtudes. En "Superhéroe" cualquiera puede resultar un superdotado pero hay que ganarlo con el sudor de la frente. ¿Es que acaso no hacen falta agallas para ser un superhéroe?
La serie "Superhéroe" no habla de niños mágicos, ni de bebés con poderes especiales, ni de seres elegidos por los dioses; no habla de ese tipo de héroes destinados a serlo más allá de sus acciones; no habla de esos héroes rodeados de ayudantes que se ven forzados a poner toda su fuerza y su astucia -muchas veces superior a las del "elegido"- para ayudar al predestinado a convertirse en el héroe que debe ser.
Esta serie ha sido concebida de manera opuesta. Sin privilegiados. Aquí se cuenta el proceso del nacimiento de un superhéroe, cuenta cómo un niño normal y corriente, por sus propias acciones, por sus hazañas, se convertirá en un ser superdotado. No porque esté especialmente destinado a ello sino por sus propias virtudes. En "Superhéroe" cualquiera puede resultar un superdotado pero hay que ganarlo con el sudor de la frente. ¿Es que acaso no hacen falta agallas para ser un superhéroe?