Poemas cruzados

“Poemas cruzados” es un libreto de poesía espontánea, como las canciones de los soldados. Habla del Paraíso perdido, de nuestra alma inmortal, de los reinos cristianos, de las derrotas, de las victorias, del amor, de las dificultades, de las humillaciones, del dolor, de la lucha consigo mismo, de la extrañeza de la vida terrena, de nuestra naturaleza caída y, por supuesto, de Dios. Tiene una deuda con Virgilio, Luys Santa Marina, fray Luis de León y Cavafis. Está impregnado de la idea de Cruzada, de lucha espiritual contra el mundo, el demonio y la carne, en el campo de batalla del alma. Está desprovisto de las blanduras del amor erótico y de la introspección sentimental de la poesía convencional. Está escrito por un español corriente, en cuyas venas hierve sangre antigua de Aragón, Cataluña y Navarra. Son versos populares, místicos, contrarrevolucionarios, afilados, sobrios, vehementes, intransigentes, no hechos para el público ni para un certamen literario, sino para derramar el corazón enamorado de Dios y de la vieja España y como solaz en el fragor de la lucha diaria para alcanzar la Jerusalén celeste. Hasta que se cumpla ese momento, la vida sobre la tierra –como dice la sentencia bíblica- sigue siendo milicia y combate.