Una historia de la soberbia en las elites culturales y su relación con el poder, desde la antigüedad hasta nuestros días.
La soberbia ha marcado a los intelectuales desde el comienzo de la historia. La gran mayoría de los artistas y creadores han hecho todo lo posible por separarse y desdeñar a la gente común para mostrarse como una casta aparte. Los antiguos brahmanes de la India, los oscuros filósofos griegos, las opacas discusiones medievales y la actual literatura incomprensible que recibe reconocimientos y galardones son -desde la perspectiva de Enrique Serna- otros momentos y ejemplos de la historia de una soberbia que, por supuesto, también existe en nuestro país.
En este libro, el autor se pregunta: ¿quién puede leer e interesarse por un artículo especializado que no tiene destinatario?, ¿por un texto que sólo cita a sus pares y llena cuartillas impenetrables?, ¿quién puede admirar una obra de "arte contemporáneo" dondela habilidad técnica y la maravilla han sido olvidadas para crear una "instalación" que sólo reúne cachivaches?
Sin embargo, la soberbia intelectual no sólo ha sido creada por los mismos intelectuales: ellos han contado con el apoyo de personas e instituciones que han apostado por la ignorancia y la arrogancia. Las distintas iglesias, los profesores sedientos de fama, los medios de comunicación masiva y algunos editores, se han convertido en los aliados de los intelectuales soberbios. La soberbia intelectual -que se revela en los distintos tipos de pedantería que son analizados por Enrique Serna- no es un asunto vinculado con la creación, sino con el poder.