Hayy ibn Yaqzan crece en una isla desierta cuidado por una gacela, como un animal más. Aunque pronto descubre la fuerza de su intelecto, que le permite compensar sus desventajas físicas en un entorno salvaje. Mediante la reflexión, Hayy asciende por sí mismo del conocimiento empírico al científico y de este al místico. Ya adulto, conoce a Asal, que se había trasladado a la isla para dedicarse a la contemplación, y le enseña el lenguaje, la civilización y la religión.
La presente edición incluye una Introducción de Marcelino Rodríguez Donís. Incorpora, además, las introducciones históricas de Marcelino Menéndez Pelayo de 1900, Ángel González Palencia de 1948 (autor también de la traducción) y Emilio Tornero Poveda de 1995, junto con las ilustraciones de la edición inglesa de Ockley de 1708.
La presente edición incluye una Introducción de Marcelino Rodríguez Donís. Incorpora, además, las introducciones históricas de Marcelino Menéndez Pelayo de 1900, Ángel González Palencia de 1948 (autor también de la traducción) y Emilio Tornero Poveda de 1995, junto con las ilustraciones de la edición inglesa de Ockley de 1708.