Lejos de la imagen glamorosa y romántica que muchos estudios históricos
colaboraron a construir, Zanatta sostiene, por ejemplo, que la relación
de Eva con Perón -no era de subordinación ni de dependencia, como muchos
se obstinan en afirmar, sino de inevitable y creciente competencia-.
Lejos también de la versión canónica sobre la caída de Perón, el autor
afirma que -de ninguna manera se trató de que el régimen perdiera fuerza
por no contar ya con la presencia de ella, sino que más bien Perón cayó
porque había terminado siendo el prisionero de la herencia política que
ella le había dejado-. Zanatta analiza un aspecto poco abordado, como es
la relación de Evita con la Iglesia Católica, que, según él, funcionó
como una barrera de contención para conciliar a la clase obrera con el
cristianismo y neutralizar al comunismo en la Argentina. Según él, el
peronismo de Evita fue «una religión secular, con sus dogmas y sus
devotos», que cuestionó en sus fundamentos más profundos las relaciones
entre modernidad y tradición, política y religión, legitimidad popular y
democracia.
colaboraron a construir, Zanatta sostiene, por ejemplo, que la relación
de Eva con Perón -no era de subordinación ni de dependencia, como muchos
se obstinan en afirmar, sino de inevitable y creciente competencia-.
Lejos también de la versión canónica sobre la caída de Perón, el autor
afirma que -de ninguna manera se trató de que el régimen perdiera fuerza
por no contar ya con la presencia de ella, sino que más bien Perón cayó
porque había terminado siendo el prisionero de la herencia política que
ella le había dejado-. Zanatta analiza un aspecto poco abordado, como es
la relación de Evita con la Iglesia Católica, que, según él, funcionó
como una barrera de contención para conciliar a la clase obrera con el
cristianismo y neutralizar al comunismo en la Argentina. Según él, el
peronismo de Evita fue «una religión secular, con sus dogmas y sus
devotos», que cuestionó en sus fundamentos más profundos las relaciones
entre modernidad y tradición, política y religión, legitimidad popular y
democracia.