Cuentos para despertar es una recopilación de cuentos para la comodidad del lector en la que se incluyen:
1) Un tobogán de Navidad
Mori, un niño que vive en la estrella Sirio, guarda un callado deseo en su corazón: tener un tobogán con el que poder viajar al planeta Tierra, para lo que escribe una carta al anciano sabio que habita en el corazón de su estrella.
2) AZUL
Azul habitaba en una de esas nubes que aparecía y desaparecía periódicamente para vigilar con disimulo a hombres, mujeres y niños. Era una nube muy confortable que se desplazaba ligera por la atmósfera terrestre deslizándose con cada ráfaga de aire.
3) El hijo del sol
El sol había enviado su luz a la tierra a cumplir la misión de que la vida se multiplicara sobre ella. Cuando la luz blanca del sol llegaba a la atmósfera terrestre, al atravesarla, se descomponía en rayos de color, y cada uno de ellos corría a dar su matiz a valles, ríos, montañas, animales, etc... Así, la vida se multiplicaba sobre la faz de la tierra animada por la luz que recibía del sol.
4) El ruiseñor furtivo
Los días de Kwain transcurren plácidos hasta que una piedra voladora se cruza en su camino. Desde ese día, se convierte en un ruiseñor furtivo en la ciudad del Gran Lago.
:
1) Un tobogán de Navidad
Mori, un niño que vive en la estrella Sirio, guarda un callado deseo en su corazón: tener un tobogán con el que poder viajar al planeta Tierra, para lo que escribe una carta al anciano sabio que habita en el corazón de su estrella.
2) AZUL
Azul habitaba en una de esas nubes que aparecía y desaparecía periódicamente para vigilar con disimulo a hombres, mujeres y niños. Era una nube muy confortable que se desplazaba ligera por la atmósfera terrestre deslizándose con cada ráfaga de aire.
3) El hijo del sol
El sol había enviado su luz a la tierra a cumplir la misión de que la vida se multiplicara sobre ella. Cuando la luz blanca del sol llegaba a la atmósfera terrestre, al atravesarla, se descomponía en rayos de color, y cada uno de ellos corría a dar su matiz a valles, ríos, montañas, animales, etc... Así, la vida se multiplicaba sobre la faz de la tierra animada por la luz que recibía del sol.
4) El ruiseñor furtivo
Los días de Kwain transcurren plácidos hasta que una piedra voladora se cruza en su camino. Desde ese día, se convierte en un ruiseñor furtivo en la ciudad del Gran Lago.
: