Cuba está de moda.
El malecón de La Habana ha olvidado sus silencios...porque ahora son relatos.
"Vidas pintadas para sobrevivir" nos presenta quince narraciones con personajes reales que se desnudan mientras reinventan sus vidas. Cuentos con finales imprevisibles, como la vida misma.
La autora pasea a los habitantes de esta tierra moviéndolos con sus voces profundas, su música, sus onomatopeyas cargadas de mensajes y su canto a la existencia que les ha tocado vivir. Apuesta por lo más humano y sonoro de esa realidad.
Todo es color, sonido …y silencios.
Aquí la necesidad y el jolgorio viajan en guagua y salta la voz cubana a la vera del árbol de los siete rayos. El árbol sagrado que toma prestado el título original de la obra: “Relatos de la tierra de la siguaraya”
Un libro que se mece entre la escasez y la esperanza, el miedo y la alegría, entre el encierro y los sueños. Una vida contada al oído. Un libro lleno de pinceladas para fotogramas. Un libro para no olvidar.
El malecón de La Habana ha olvidado sus silencios...porque ahora son relatos.
"Vidas pintadas para sobrevivir" nos presenta quince narraciones con personajes reales que se desnudan mientras reinventan sus vidas. Cuentos con finales imprevisibles, como la vida misma.
La autora pasea a los habitantes de esta tierra moviéndolos con sus voces profundas, su música, sus onomatopeyas cargadas de mensajes y su canto a la existencia que les ha tocado vivir. Apuesta por lo más humano y sonoro de esa realidad.
Todo es color, sonido …y silencios.
Aquí la necesidad y el jolgorio viajan en guagua y salta la voz cubana a la vera del árbol de los siete rayos. El árbol sagrado que toma prestado el título original de la obra: “Relatos de la tierra de la siguaraya”
Un libro que se mece entre la escasez y la esperanza, el miedo y la alegría, entre el encierro y los sueños. Una vida contada al oído. Un libro lleno de pinceladas para fotogramas. Un libro para no olvidar.