Los amigos que dan título a la novela son Ted Mundy, hijo de un militar británico, nacido en 1947 en Pakistán -el mismo día en que el país declaró su independencia-, y Sasha, hijo de un pastor luterano de la República Democrática Alemana refugiado en la República Federal.
Los dos se conocen siendo estudiantes en Berlín Occidental, una ciudad sacudida por las algaradas y las manifestaciones; se reencuentran una década después en el turbio ambiente de la guerra fría y el espionaje, y vuelven a coincidir una vez más -su experiencia más atroz hasta la fecha- en el mundo unipolar del terror, el contraterror y la guerra de las mentiras.
«Nunca como en Amigos absolutos Le Carré había dado vía libre a su el ocuente irritación ante una política corrupta, falaz y generadora de barbarie.»
La Vanguardia
Los dos se conocen siendo estudiantes en Berlín Occidental, una ciudad sacudida por las algaradas y las manifestaciones; se reencuentran una década después en el turbio ambiente de la guerra fría y el espionaje, y vuelven a coincidir una vez más -su experiencia más atroz hasta la fecha- en el mundo unipolar del terror, el contraterror y la guerra de las mentiras.
«Nunca como en Amigos absolutos Le Carré había dado vía libre a su el ocuente irritación ante una política corrupta, falaz y generadora de barbarie.»
La Vanguardia