El que es del Atleti debe ser una persona especial, amante de las emociones fuertes y con un toque romántico en un mundo, el del fútbol, cada vez más mercantilista, dominado por el dinero. 100 motivos para ser del Atleti te da un montón de razones, de historias, de personajes, leyendas y anéctodas para que, si todavía no lo eres, te hagas del club más peculiar y apasionante del mundo: un equipo único. Y lo hace, sobre todo, desde el punto de vista de un aficionado de a pie y para aquellos que todavía se emocionan cuando su “once” gana o pierde, o para los que les gusta ver el fútbol al calor de una hinchada como ninguna y en un estadio con sabor y tradición.
Fernando Castán Roncero (Madrid, 1963) es periodista, licenciado en Ciencias Políticas y en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid. Durante 9 años trabajó en la sección de Nacional de la Agencia EFE, entre los años 1996 y 1999 fue delegado de ese medio en Castilla y León y desde 2000 trabaja en el departamento de Deportes de esa agencia de noticias, donde cubre informaciones de casi todo menos de su Atleti. Fue socio del Atlético de Madrid de niño y ahora es abonado desde 1991. Su abono de la grada de preferencia que mantiene en el mismo asiento desde hace más de una década es “sagrado” y le encanta ir a esos partidos a los que apenas asiste gente, un miércoles de enero en una eliminatoria de la Copa del Rey, por ejemplo. De los que forjan el carácter de un atlético. Ha seguido como aficionado al equipo por toda España y parte de Europa, y ha asistido a seis finales distintas.
Fernando Castán Roncero (Madrid, 1963) es periodista, licenciado en Ciencias Políticas y en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid. Durante 9 años trabajó en la sección de Nacional de la Agencia EFE, entre los años 1996 y 1999 fue delegado de ese medio en Castilla y León y desde 2000 trabaja en el departamento de Deportes de esa agencia de noticias, donde cubre informaciones de casi todo menos de su Atleti. Fue socio del Atlético de Madrid de niño y ahora es abonado desde 1991. Su abono de la grada de preferencia que mantiene en el mismo asiento desde hace más de una década es “sagrado” y le encanta ir a esos partidos a los que apenas asiste gente, un miércoles de enero en una eliminatoria de la Copa del Rey, por ejemplo. De los que forjan el carácter de un atlético. Ha seguido como aficionado al equipo por toda España y parte de Europa, y ha asistido a seis finales distintas.