¿Quién no ha soñado con la Arabia de Las mil y una noches? ¿Quién no ha viajado a Bombay, Hong Kong o Yokohama con el aventurero Phileas Fogg? ¿Quién no ha deseado desentrañar los misterios del corazón de África con el Quatermain de Haggard? Y desde una perspectiva absolutamente decimonónica, ¿quién no percibe lo exótico en el sur de España tal y como lo hizo Washington Irving en Cuentos de la Alhambra?
En la naturaleza humana está el viajar y sorprenderse con lo nuevo y lo diferente, con territorios y culturas que despiertan el sueño y la imaginación. Y aunque el mundo haya cambiado en estos casi dos siglos, nosotros no. Este nuevo volumen de Ácronos quiere dar un paso más allá e investigar en esos orígenes de lo que somos hoy en día, abandonar la sociedad cosmopolita de la Francia y la Inglaterra del XIX y mostrar lo que fue —o muy bien pudo haber sido— si nuestras miradas hubieran podido ver más allá de cualquier frontera.
¡Esto es...! Bueno, vale, si jugamos a las etiquetas geográficas puede que no sea estrictamente steampunk, pero cuando terminéis las páginas de este volumen volveréis a estas palabras: ¡Esto es steampunk!
En la naturaleza humana está el viajar y sorprenderse con lo nuevo y lo diferente, con territorios y culturas que despiertan el sueño y la imaginación. Y aunque el mundo haya cambiado en estos casi dos siglos, nosotros no. Este nuevo volumen de Ácronos quiere dar un paso más allá e investigar en esos orígenes de lo que somos hoy en día, abandonar la sociedad cosmopolita de la Francia y la Inglaterra del XIX y mostrar lo que fue —o muy bien pudo haber sido— si nuestras miradas hubieran podido ver más allá de cualquier frontera.
¡Esto es...! Bueno, vale, si jugamos a las etiquetas geográficas puede que no sea estrictamente steampunk, pero cuando terminéis las páginas de este volumen volveréis a estas palabras: ¡Esto es steampunk!