Lo tuvo todo y lo perdió todo. A Adolfo Suárez, un político tan irrepetible como la Transición que gestionó, el destino le volvió definitivamente la espalda. Una terrible enfermedad sobre la que los médicos no se ponen de acuerdo -¿Alzheimer?, ¿demencia?- le condenó al olvido del poder disfrutado, de los hechos vividos, de los laureles logrados; pero también, piadosamente, de la desaparición de sus seres queridos: su mujer y su hija Mariam, ambas fallecidas tras una intensa lucha contra el cáncer.
Como si de una verdadera tragedia griega se tratara, este libro cuenta la trayectoria personal y pública de un hombre complejo, «más héroe que santo», cuya personalidad resulta muy difícil de clasificar; un personaje ambicioso pero a la vez de una extrema sencillez, al que no le faltaron enemigos, pero a quien nadie duda en reconocer como una de las figuras más relevantes de los años de la restauración democrática española.
¿Fue un oportunista o un hábil estadista? ¿Un improvisador o el ejecutor de una partitura minuciosamente compuesta? ¿Le designó el Rey por su audacia y porque percibió en él cualidades ocultas, o le nombró para disponer de mayor libertad de acción que si hubiera elegido a Areilza, Fraga o Fernández Miranda? ¿Hizo Suárez lo que quería hacer o se vio desbordado por una fuerza que no pudo controlar? ¿Cuál fue el verdadero motivo de su dimisión?
José García Abad, autor de La soledad del Rey -publicado con éxito por esta editorial- ha entrevistado a toda la gente cercana al primer presidente de la democracia para recabar sus recuerdos y testimonios: compañeros de partido, familiares, asesores presidenciales, analistas políticos… Incluso ha hablado con su fiel mayordomo, sus paisanos y sus adversarios. Estas páginas son resultado de tales encuentros, así como del profundo análisis de un mito que ha entrado en la historia sin desvelar su misterio.
Como si de una verdadera tragedia griega se tratara, este libro cuenta la trayectoria personal y pública de un hombre complejo, «más héroe que santo», cuya personalidad resulta muy difícil de clasificar; un personaje ambicioso pero a la vez de una extrema sencillez, al que no le faltaron enemigos, pero a quien nadie duda en reconocer como una de las figuras más relevantes de los años de la restauración democrática española.
¿Fue un oportunista o un hábil estadista? ¿Un improvisador o el ejecutor de una partitura minuciosamente compuesta? ¿Le designó el Rey por su audacia y porque percibió en él cualidades ocultas, o le nombró para disponer de mayor libertad de acción que si hubiera elegido a Areilza, Fraga o Fernández Miranda? ¿Hizo Suárez lo que quería hacer o se vio desbordado por una fuerza que no pudo controlar? ¿Cuál fue el verdadero motivo de su dimisión?
José García Abad, autor de La soledad del Rey -publicado con éxito por esta editorial- ha entrevistado a toda la gente cercana al primer presidente de la democracia para recabar sus recuerdos y testimonios: compañeros de partido, familiares, asesores presidenciales, analistas políticos… Incluso ha hablado con su fiel mayordomo, sus paisanos y sus adversarios. Estas páginas son resultado de tales encuentros, así como del profundo análisis de un mito que ha entrado en la historia sin desvelar su misterio.