El poemario que presento, Alboradas crepusculares, es un compendio de poemas dedicados, que se encuentran en el Poemario del Retorno y Residencia en el presente. Lo hago no solo por el motivo de las dedicatorias, sino también porque cuando los volví a leer encontré la desbordante explosión de la influencia de Cesar Vallejo; faltaba la rítmica, nómada, gitana, así mismo exuberante, influencia de Federico García Lorca. Mi otro eje constitutivo poético. En ese momento, y ahora, me encontraba, y me encuentro, retomando mis lecturas, sobre todo la memorización, de poemas que acostumbraba a recitar para los amigos. Al volver a leer los poemas dedicados, me di cuenta que le faltaban musicalidad; entonces hice una segunda versión, acompañados, ahora por la musicalidad garcía-lorquiana.
Entonces presento este poemario, dedicado a entrañables trayectorias de vida, que afectaron a mi propia trayectoria.
Entonces presento este poemario, dedicado a entrañables trayectorias de vida, que afectaron a mi propia trayectoria.