Ambrosia nos cuenta cómo su espíritu democrático y de participación con el movimiento social y guerrillero, fue desenvolviéndose y tomando su propia perspectiva desde las diferentes instituciones donde estuvo ubicada.
Fue ahí, en esos tiempos cuando conoció a su “Trovador” y a su amigo Aureliano; dos personajes reales que llegaron a formar parte de la esencia de Ambrosia.
El “Trovador" se convirtió en su gran amor, el amor de su vida, a quien pudo disfrutar por muy poco tiempo. Aún así, Ambrosia lo sigue buscando y esperando a través de diferentes expresiones artísticas: pintura, dibujo, poesía y las cartas enviadas a su gran amigo.
Ambrosia nos lleva a viajar con ella del pasado al presente constantemente y nos presenta tanto sus alegrías como sus tristezas: La muerte de su padre, la de su amado “trovador” y la de su madre. Todos momentos de enorme dolor.
El amor profundo de Ambrosia la lleva a estar segura de que en algún momento volverá a encontrar a su amado “trovador”. Ella lo espera quizá en otro cuerpo y con otra cara pero con el mismo corazón. A la vez espera también la llegada de su querido amigo Aureliano, de quien una tarde cualquiera, ya cansada de esperar, por fin se despide de él y de su pasado.
Fue ahí, en esos tiempos cuando conoció a su “Trovador” y a su amigo Aureliano; dos personajes reales que llegaron a formar parte de la esencia de Ambrosia.
El “Trovador" se convirtió en su gran amor, el amor de su vida, a quien pudo disfrutar por muy poco tiempo. Aún así, Ambrosia lo sigue buscando y esperando a través de diferentes expresiones artísticas: pintura, dibujo, poesía y las cartas enviadas a su gran amigo.
Ambrosia nos lleva a viajar con ella del pasado al presente constantemente y nos presenta tanto sus alegrías como sus tristezas: La muerte de su padre, la de su amado “trovador” y la de su madre. Todos momentos de enorme dolor.
El amor profundo de Ambrosia la lleva a estar segura de que en algún momento volverá a encontrar a su amado “trovador”. Ella lo espera quizá en otro cuerpo y con otra cara pero con el mismo corazón. A la vez espera también la llegada de su querido amigo Aureliano, de quien una tarde cualquiera, ya cansada de esperar, por fin se despide de él y de su pasado.