Muchos años han transcurrido desde que Min Ho se convirtió en el ama de Argos, su cuerpo es tan joven como el primer día de la herencia de su Sello pero en su interior una lucha se lleva a cabo desde ese mismo instante.
Sus seres queridos se han marchado igual que el Camino de los Cerezos y ahora ella se ha quedado a cargo del poderoso Clan del Dragón. La memoria de la Dama del Sello de Oro guarda muchos secretos, entre ellos el recuerdo de un regalo que le hiciera su padre antes de heredar su Sello, un obsequio que tiene una finalidad y que la llevará a conocer la historia de su destino.
Al mismo tiempo el motivo que durante siglos durmió en el pensamiento de los integrantes del Clan del Dragón se acerca y una infame batalla está por comenzar con numerosos enemigos que saldrán de los confines de la Tierra para acabar con su objetivo principal; La Dama del Dragón Dorado.
“Crono brilló como el mismo astro rey en medio del Cielo, opacando el esplendor de Argos que yacía detrás de su ama, de sus ojos brotó un relámpago nevado que parecía estar completamente hecho de hielo y atrapó a Min Ho en un parpadeo para sumergirla en un profundo sueño. Y la Dama durmió”.
Sus seres queridos se han marchado igual que el Camino de los Cerezos y ahora ella se ha quedado a cargo del poderoso Clan del Dragón. La memoria de la Dama del Sello de Oro guarda muchos secretos, entre ellos el recuerdo de un regalo que le hiciera su padre antes de heredar su Sello, un obsequio que tiene una finalidad y que la llevará a conocer la historia de su destino.
Al mismo tiempo el motivo que durante siglos durmió en el pensamiento de los integrantes del Clan del Dragón se acerca y una infame batalla está por comenzar con numerosos enemigos que saldrán de los confines de la Tierra para acabar con su objetivo principal; La Dama del Dragón Dorado.
“Crono brilló como el mismo astro rey en medio del Cielo, opacando el esplendor de Argos que yacía detrás de su ama, de sus ojos brotó un relámpago nevado que parecía estar completamente hecho de hielo y atrapó a Min Ho en un parpadeo para sumergirla en un profundo sueño. Y la Dama durmió”.