No trabajo. En el sentido estricto de la palabra, no estoy trabajando, ya que no tengo un empleo y tampoco administro mi tiempo como la mayoría.
En estos momentos estoy en un café disfrutando una agradable tarde y fumo un habano añejado por seis años, estoy en mi computadora portátil, en un barrio donde se reúnen artistas; vine porque quiero robarles un par de musas y porque prefiero disfrutar del viento en la cara que los gestos de un jefe molesto.
No trabajo y no tengo jefe, un estado que para muchos sería el ideal (y por supuesto lo es). Tengo libertad y la disfruto, eso me permite tener tiempo para estar con mi familia, con mis perros, con mis amigos, con un buen libro, etc.
Desde hace tiempo dejé de hacer las cosas que hace la mayoría, para disfrutar la vida, para tener más tiempo y ganar dinero con la ley del mínimo esfuerzo.
Esa es mi primera propuesta: hagas lo que hagas en este momento, tienes que abrazar la ley del mínimo esfuerzo.
Todos los que han hecho esto -animados por mis seminarios o libros-, están gozando de la vida, con mucho tiempo libre y con todo el control de sus negocios. Ahora es tu turno, pero primero debes eliminar esa creencia limitante que te impulsa a trabajar de la manera tradicional, es decir, trabajar como todos lo hacen.
Vivimos en una sociedad que nos obliga acumular horas de extenuante trabajo para que seamos tomados en serio en el ámbito laboral, pero eso es absurdo, ya que siguiendo ciertas estrategias podrías hacer más, trabajando menos.
De eso trata este libro.
En estos momentos estoy en un café disfrutando una agradable tarde y fumo un habano añejado por seis años, estoy en mi computadora portátil, en un barrio donde se reúnen artistas; vine porque quiero robarles un par de musas y porque prefiero disfrutar del viento en la cara que los gestos de un jefe molesto.
No trabajo y no tengo jefe, un estado que para muchos sería el ideal (y por supuesto lo es). Tengo libertad y la disfruto, eso me permite tener tiempo para estar con mi familia, con mis perros, con mis amigos, con un buen libro, etc.
Desde hace tiempo dejé de hacer las cosas que hace la mayoría, para disfrutar la vida, para tener más tiempo y ganar dinero con la ley del mínimo esfuerzo.
Esa es mi primera propuesta: hagas lo que hagas en este momento, tienes que abrazar la ley del mínimo esfuerzo.
Todos los que han hecho esto -animados por mis seminarios o libros-, están gozando de la vida, con mucho tiempo libre y con todo el control de sus negocios. Ahora es tu turno, pero primero debes eliminar esa creencia limitante que te impulsa a trabajar de la manera tradicional, es decir, trabajar como todos lo hacen.
Vivimos en una sociedad que nos obliga acumular horas de extenuante trabajo para que seamos tomados en serio en el ámbito laboral, pero eso es absurdo, ya que siguiendo ciertas estrategias podrías hacer más, trabajando menos.
De eso trata este libro.