Se dice que todo juego es azar, y como tal, aparentemente, el hecho de ganar en ellos no está sometido a normas previsibles, como no sean las propias normas que cada tipo de juego exige. Sin embargo la experiencia con los llamados juegos de azar demuestra que, independientemente de la buena suerte con la que es favorecido el jugador, es posible conocer formas que pudieran garantizar el éxito en el juego. La lotería es uno de ellos.
Desde que comenzamos la vida, consciente o inconscientemente ya nos estamos vinculando con los números. La naturaleza toda puede expresarse en cifras numéricas, pues todo tiene un volumen, una dimensión. Así también podemos referirnos a los procesos vitales que le son inherentes a la naturaleza, los cuales se producen en determinados ciclos de tiempo que se expresan en cifras.
Este libro ofrece algunos procedimientos para orientar al jugador, así como la Charada cubana y Charada Santera a fin de que pueda acertar con mayores posibilidades de las que pudieran tenerse cuando no se cuenta con alguna referencia; números maestros y código del destino así como el papel de los sueños para las apuestas en la lotería.
Desde que comenzamos la vida, consciente o inconscientemente ya nos estamos vinculando con los números. La naturaleza toda puede expresarse en cifras numéricas, pues todo tiene un volumen, una dimensión. Así también podemos referirnos a los procesos vitales que le son inherentes a la naturaleza, los cuales se producen en determinados ciclos de tiempo que se expresan en cifras.
Este libro ofrece algunos procedimientos para orientar al jugador, así como la Charada cubana y Charada Santera a fin de que pueda acertar con mayores posibilidades de las que pudieran tenerse cuando no se cuenta con alguna referencia; números maestros y código del destino así como el papel de los sueños para las apuestas en la lotería.