Con influencias de Edgar Allan Poe, el “amargo” Bierce demuestra en todos sus relatos cortos una maestría en el cuento poco común gracias a su incisivo sentido del detalle descriptivo (tanto emocional como ambiental) y a una fértil imaginación que emplea para crear historias de creciente interés que atrapan al lector a pesar de que la temática o el escenario reflejado parezca no serle de ese interés en los inicios de la narración.
Sus personajes resultan estimulantes, su enfoque gratamente antimaniqueo, las resoluciones generalmente sorprendentes.
Las acciones tanto se recogen en ambientes fantásticos como de misterio, intriga o de angustia existencial, casi siempre con el humor negro-macabro presidiendo el usual destino trágico de sus incitantes caracteres, sea el protagonista de la obra maestra “El Puente Sobre El Río Búho”, en el apartado de cuentos de soldados (de la Guerra Civil estadounidense), o el personaje central de “El Hombre y La Vívora”, en el apartado de cuentos de civiles. Libro imprescindible del siempre recomendable “Bitter” Bierce.
Sus personajes resultan estimulantes, su enfoque gratamente antimaniqueo, las resoluciones generalmente sorprendentes.
Las acciones tanto se recogen en ambientes fantásticos como de misterio, intriga o de angustia existencial, casi siempre con el humor negro-macabro presidiendo el usual destino trágico de sus incitantes caracteres, sea el protagonista de la obra maestra “El Puente Sobre El Río Búho”, en el apartado de cuentos de soldados (de la Guerra Civil estadounidense), o el personaje central de “El Hombre y La Vívora”, en el apartado de cuentos de civiles. Libro imprescindible del siempre recomendable “Bitter” Bierce.