En este lúcido ensayo sobre el pensamiento y la persona de Hannah Arendt, Marie Luise Knott indaga en las estrategias que esta filósofa utilizó para lograr la libertad intelectual en el contexto histórico que vivió. Según Knott, en el corazón mismo de su controvertida teoría sobre la banalidad del mal subyace una visión del mundo muy distinta a la de sus contemporáneos, que nadie antes se había atrevido a explorar.
En su esfuerzo por trascender los viejos patrones filosóficos y culturales que habían degenerado en el horror y mostrado su esterilidad, Arendt se dispuso a «desaprenderlos» para poder ver las cosas desde una perspectiva totalmente renovada y conquistar así nuevos terrenos de libertad. Para ello recorrió nuevos caminos de pensamiento que Knott analiza en cuatro acciones: reír, traducir, perdonar y dramatizar.
En su esfuerzo por trascender los viejos patrones filosóficos y culturales que habían degenerado en el horror y mostrado su esterilidad, Arendt se dispuso a «desaprenderlos» para poder ver las cosas desde una perspectiva totalmente renovada y conquistar así nuevos terrenos de libertad. Para ello recorrió nuevos caminos de pensamiento que Knott analiza en cuatro acciones: reír, traducir, perdonar y dramatizar.