La tumba no siempre es el final de una vida. Muchas veces, recién en esa
instancia comienzan las más extrañas aventuras, nuevas historias que
reflejan las tragicómicas e impredecibles conductas humanas. Estos
trayectos póstumos son la continuación de odios, afectos y
arbitrariedades.
Desde la venta de momias como panacea contra enfermedades, el uso de
corazones de príncipes como pigmento y el cráneo de Descartes exhibido
en un museo, hasta los intentos por robar el cadáver de Lincoln junto al
extraño periplo del supuesto cuerpo de su asesino que fue lucido en
circos y teatros, y la cabeza desaparecida de Pancho Villa. Todas
obsesiones por adueñarse del poder que emanan los muertos ilustres.
«Tumbas sin descanso» relata las inquietantes historias de perturbación
durante el reposo, producto de amores y pasiones enfermizas. Acaso el
cerebro de Einstein seguirá flotando en formol, en una lata de sidra,
hasta que alguien descubra sus secretos.
instancia comienzan las más extrañas aventuras, nuevas historias que
reflejan las tragicómicas e impredecibles conductas humanas. Estos
trayectos póstumos son la continuación de odios, afectos y
arbitrariedades.
Desde la venta de momias como panacea contra enfermedades, el uso de
corazones de príncipes como pigmento y el cráneo de Descartes exhibido
en un museo, hasta los intentos por robar el cadáver de Lincoln junto al
extraño periplo del supuesto cuerpo de su asesino que fue lucido en
circos y teatros, y la cabeza desaparecida de Pancho Villa. Todas
obsesiones por adueñarse del poder que emanan los muertos ilustres.
«Tumbas sin descanso» relata las inquietantes historias de perturbación
durante el reposo, producto de amores y pasiones enfermizas. Acaso el
cerebro de Einstein seguirá flotando en formol, en una lata de sidra,
hasta que alguien descubra sus secretos.