Esta obra es una guía a seguir sobre cómo iniciar una dieta para bajar de peso comiendo solamente frutas, semillas secas, leche de almendra y, miel en forma de batidos, licuados, granizados o, cocteles de fruta durante 77 días. El autor tiene la intención de cambiar su estado de ánimo para que pueda mantener el ritmo y, conservar una dieta de la vida real durante toda su vida. Hay una gran cantidad de información sobre los beneficios de comer frutas, tales como: la mejoría de la circulación sanguínea, el fortalecimiento del sistema inmunológico, la mejoría de su sistema digestivo y, casos similares. Aquí se le explica por qué la dieta es específicamente 77 días: se necesita más o menos un mes para adquirir una nueva disciplina o, hábito, se tarda más o menos un mes para ver los cambios físicos en esa nueva disciplina o, hábito, hay un período de gracia de diez días para que la persona tomando esta dieta pueda atenerse a esa disciplina o, hábito y, hay siete días de dieta seguida sin interrupciones. El autor le informa acerca de la diferencia de las frutas "orgánicas" y, las frutas "cultivadas químicamente", las cuales están disponibles en los supermercados y, tiendas de alimentos saludables (tiendas naturistas), así como en los mercados del campesino. Las frutas orgánicas son cultivadas naturalmente como Dios las hizo crecer. Las frutas cultivadas químicamente requieren grandes cantidades de productos químicos para su producción, tales como: fertilizantes químicos (productos químicos utilizados para hacerlas crecer más grandes), pesticidas (productos químicos utilizados para combatir las plagas que atacan a la fruta), insecticidas (productos químicos utilizados para la lucha contra los insectos que atacan a la fruta), fungicidas (productos químicos utilizados para contraatacar a los hongos que atacan a la fruta), antibióticos (se inyectan dentro de la semilla o, en un árbol pequeño en el laboratorio), hormonas de crecimiento (se inyectan dentro de la semilla o, en un árbol pequeño en el laboratorio), reguladores del crecimiento (químicos utilizados para hacer que el fruto alcance un tamaño determinado para el mercado antes de la cosecha), aceleradores (productos químicos rociados en el fruto joven para conseguir que todos los frutos maduren a una sola vez), colorantes (productos químicos aplicados a la fruta para hacer que brille en color) y, la irradiación (radiación aplicada a la planta y, la fruta para alterar su estado de producción).
El autor le da una recomendación sobre cómo comprar y, qué comprar en el supermercado, la tienda de alimentos saludables o, en el mercado del campesino, tales como: La compra de granos de calidad, toda avena, trigo bulgur, quinua y, arroz integral para utilizarlos en su dieta y, comerlos en los fines de semana, de acuerdo con el plan de dieta. Hay información sobre las frutas más contaminadas y, verduras (más sucias) que se encuentran en el supermercado, de acuerdo con la Guía del Grupo de Trabajo Ambiental del Comprador, las cuales son: las manzanas, el apio, los pimientos de campana, los melocotones, las fresas, las nectarinas, las uvas, las espinacas, las lechugas, los pepinos, los arándanos y, las patatas. Las frutas y, verduras menos contaminadas (más limpias) que se encuentran en el supermercado, de acuerdo con la Guía del Grupo de Trabajo Ambiental del Comprador, son: las cebollas, el maíz dulce, la piña, el aguacate, el col, los guisantes, los espárragos, los mangos, las berenjenas, el kiwi, el melón, las patatas dulces, las toronjas, las sandías y, las setas. Además, hay información sobre el contenido de comida chatarra tal como: enormes cantidades de sal de mesa, glutamatos mono sódicos, gluten y, grasas trans; las cuales son aceites parcialmente hidrogenados. Además, se le es dada una explicación de por qué el beber agua filtrada del grifo o, de la llave, es la mejor bebida de todas. Se mencionan algunos de los contenidos de las bebidas populares como la Coca-Cola y, la Pepsi-Cola
El autor le da una recomendación sobre cómo comprar y, qué comprar en el supermercado, la tienda de alimentos saludables o, en el mercado del campesino, tales como: La compra de granos de calidad, toda avena, trigo bulgur, quinua y, arroz integral para utilizarlos en su dieta y, comerlos en los fines de semana, de acuerdo con el plan de dieta. Hay información sobre las frutas más contaminadas y, verduras (más sucias) que se encuentran en el supermercado, de acuerdo con la Guía del Grupo de Trabajo Ambiental del Comprador, las cuales son: las manzanas, el apio, los pimientos de campana, los melocotones, las fresas, las nectarinas, las uvas, las espinacas, las lechugas, los pepinos, los arándanos y, las patatas. Las frutas y, verduras menos contaminadas (más limpias) que se encuentran en el supermercado, de acuerdo con la Guía del Grupo de Trabajo Ambiental del Comprador, son: las cebollas, el maíz dulce, la piña, el aguacate, el col, los guisantes, los espárragos, los mangos, las berenjenas, el kiwi, el melón, las patatas dulces, las toronjas, las sandías y, las setas. Además, hay información sobre el contenido de comida chatarra tal como: enormes cantidades de sal de mesa, glutamatos mono sódicos, gluten y, grasas trans; las cuales son aceites parcialmente hidrogenados. Además, se le es dada una explicación de por qué el beber agua filtrada del grifo o, de la llave, es la mejor bebida de todas. Se mencionan algunos de los contenidos de las bebidas populares como la Coca-Cola y, la Pepsi-Cola