El año en que viví peligrosamente es la segunda novela de la trilogía de Laura Samitier. En la primera entrega de la serie, El año en que fui un personaje de ficción, Laura abandona su vida burguesa para lanzarse a la aventura de descubrir la verdad sobre sí misma, y por extensión, sobre el mundo en que vivimos.
En esta segunda novela, Laura ha empezado ya una nueva vida sobre el trasfondo del amor a PT, un columnista de prensa, y cuando cree que está a las puertas de consumar la gran pasión de su vida, se encuentra con que ha saltado a la fama de un modo bastante insólito. PT la ha dado a conocer en los medios de comunicación donde trabaja y todo el establishment barcelonés conoce su existencia y su historia. Para su desgracia, los más conservadores no ven con buenos ojos sus ideas y su conducta, y se lanzan a hacerle la vida imposible. De este modo, lo que había empezado casi como un cuento de hadas se convierte en un thriller trepidante con peligros insospechados en cada esquina, que la protagonista afronta con un torrente de sentimientos encontrados y con incursiones en el mundo del más allá, que al parecer, también quiere participar en la trama.
Mientras trata de salvar el pellejo, Laura encuentra su lugar en el mundo y se pregunta si la vida no es en realidad un gran escenario en el que todos somos personajes de ficción en busca de una historia única e irrepetible.
Advertencia: esta novela solo es apta para personas políticamente incorrectas. Hombres y mujeres convencionales, mejor abstenerse. En todo caso, el libro no dejará indiferente a nadie.
En esta segunda novela, Laura ha empezado ya una nueva vida sobre el trasfondo del amor a PT, un columnista de prensa, y cuando cree que está a las puertas de consumar la gran pasión de su vida, se encuentra con que ha saltado a la fama de un modo bastante insólito. PT la ha dado a conocer en los medios de comunicación donde trabaja y todo el establishment barcelonés conoce su existencia y su historia. Para su desgracia, los más conservadores no ven con buenos ojos sus ideas y su conducta, y se lanzan a hacerle la vida imposible. De este modo, lo que había empezado casi como un cuento de hadas se convierte en un thriller trepidante con peligros insospechados en cada esquina, que la protagonista afronta con un torrente de sentimientos encontrados y con incursiones en el mundo del más allá, que al parecer, también quiere participar en la trama.
Mientras trata de salvar el pellejo, Laura encuentra su lugar en el mundo y se pregunta si la vida no es en realidad un gran escenario en el que todos somos personajes de ficción en busca de una historia única e irrepetible.
Advertencia: esta novela solo es apta para personas políticamente incorrectas. Hombres y mujeres convencionales, mejor abstenerse. En todo caso, el libro no dejará indiferente a nadie.