El Embajador de Confínia: en manos del enemigo

Yordina no encaja en el sitio que le pertenece de la sociedad. Aunque es la hija de la Reina de Desértia, durante la adolescencia ha acumulado un gran número de pequeñas infracciones que ha pagado con trabajos de voluntariado social. El día de su decimonoveno cumpleaños, y ya mayor de edad, volverá a desafiar las leyes de la nación, y convencida que como castigo le retirarán el permiso de pilotar naves voladoras, no dejará escapar la última oportunidad que tendrá para intentar huir del destino que le quieren imponer. Poco después de cruzar la frontera con Confínia, su nave será abatida por Kilián, que la retendrá con el propósito de asegurar la integridad de su embajador, incomunicado en Desértia desde hace varios días. Lo que empezará como una simple detención se convertirá en un conflicto emocional que los obligará a tomar decisiones no siempre de acuerdo con sus intereses personales.