Con la muerte de Osama bin Laden el mundo pareció cerrar una época. Christopher Hitchens reflexiona acerca de la figura que atemorizó a Occidente durante diez años, su final y su sangriento y funesto legado.
Todo cambió el 11 de septiembre de 2001 cuando 19 terroristas suicidas secuestraron cuatro aviones y sembraron el caos y la destrucción. El siglo XXI comenzaba cubierto de sangre y barro y el espectro de Al Qaeda y su líder, Osama bin Laden, ocuparon un espacio inusitado en el imaginario global. Desde la seguridad en los aeropuertos hasta las guerras de Afganistán e Iraq, la onda expansiva de esos atentados aún se hace notar.
Diez años más tarde Estados Unidos acabó con su principal enemigo, pero ¿qué representaba Bin Laden? Más aún, ¿quién era y qué había conseguido? Esas son las preguntas que la incisiva pluma de Christopher Hitchens intenta responder.