Atenas, siglo V a.C. Isómaco es un respetado ciudadano que, movido por su admiración hacia las ideas de hombres como Sócrates, Anaxágoras y Heródoto, participa en la Asamblea y en los asuntos públicos de su ciudad en defensa de Pericles. Cuando compra al esclavo Neleo para ejercer como pedagogo de su hijo Iónides, ignora que ha puensto en funcionamiento la implacable rueda del destino y que su mundo, al igual que el de toda la Hélade, cambiará para siempre.
¿Cuál es la relación entre el misterioso asesinato ocurrido en la apacible hacienda familiar y Alcinoo? Una ira ciega se apodera de Isómaco, quien acude al dios de Delfos en busca de ayuda para llevar a cabo su venganza. El joven Iónides, lúcido testigo del combate entre el odio y la razón, recibirá una enseñanza que marcará toda su vida.
Antonio Penadés nació en Valencia en 1970, es licenciado en Derecho y Periodismo y ante todo un lector e investigador apasionado por la Antigüedad griega. En esta, su primera novela, ha sabido plasmar la vida cotidiana de los atenienses del siglo de Pericles, un momento fundamental en la historia de Grecia: aquel en el que, tras llegar a su máximo esplendor, comienza la caída. Penadés trabaja a la manera de Homero y de los clásicos griegos, creando a un héroe y a su antagonista, y mostrando su evolución encarnado cada uno de ellos las dos caras del mundo griego.
¿Cuál es la relación entre el misterioso asesinato ocurrido en la apacible hacienda familiar y Alcinoo? Una ira ciega se apodera de Isómaco, quien acude al dios de Delfos en busca de ayuda para llevar a cabo su venganza. El joven Iónides, lúcido testigo del combate entre el odio y la razón, recibirá una enseñanza que marcará toda su vida.
Antonio Penadés nació en Valencia en 1970, es licenciado en Derecho y Periodismo y ante todo un lector e investigador apasionado por la Antigüedad griega. En esta, su primera novela, ha sabido plasmar la vida cotidiana de los atenienses del siglo de Pericles, un momento fundamental en la historia de Grecia: aquel en el que, tras llegar a su máximo esplendor, comienza la caída. Penadés trabaja a la manera de Homero y de los clásicos griegos, creando a un héroe y a su antagonista, y mostrando su evolución encarnado cada uno de ellos las dos caras del mundo griego.