Las amazonas eran un mítico pueblo del Asia, que luego se expandió a Europa. La relación entre pueblos tan antiguos como la de los hititas con los celtas y la de los hititas con las amazonas; y posteriormente entre los celtas y las amazonas y entre los celtas y los chachapollas termina por guiarnos a una realidad que pudo ser posible y es que los chachapollas hayan podido ser el origen de las famosas mujeres guerreras que enfrentaron tan valientemente al primer europeo moderno que exploró el Amazonas, el español Francisco de Orellana.
Sí vemos las leyendas que nos hablan de mujeres guerreras o de fuertes matriarcados alrededor del mundo, podríamos pensar que su cultura, en diferentes matices, se hizo presente en diversas regiones bastantes distanciadas entre sí unas de otras. Esta cultura luego fue substituida por una cultura basada en la fuerte supremacía masculina.
Lugares como el norte de China y su frontera actual con el sur de Rusia, la India, Camboya, alguna isla del Caribe y la selva amazónica pudieron tener un origen común o al menos contactos importantes con esta cultura de mujeres guerreras.
Los amorianos, pueblo caucásico, cuyo origen pudo estar en los montes Caucasos, pudieron estar en la antigüedad relacionados con las amazonas las cuales tuvieron su origen en el sur de Rusia o Turquía, vale decir cerca de los montes Caucasos.
Es llamativo que las amazonas se denominaran así mismas como amorianas, pueblo que fue el primero o uno de los primeros que pobló América, según ciertas teorías. Este pueblo caucásico pudo terminar por establecerse en lo que ahora es la Amazonía y pudo recibir mujeres de origen celta-chachapollas que huían del imperio Inca. Puesto que ambos tenían un origen común.
Existen leyendas sobre mujeres guerreras, en el sur de los Andes, en la puna peruana, donde el matriarcado tiene antiguas raíces. ¿Serían las mujeres chachapollas que fueron deportadas después de la conquista del Imperio de las nubes, es decir de los chachapollas, por parte de los incas. Estos últimos libraron tres guerras en contra de los chachapollas logrando finalmente derrotarlos, esto sucedía apenas el equivalente a dos generaciones antes del arribo de los españoles conquistadores. Lo que los incas hicieron entonces con los chachapollas sobrevivientes, entre los cuales los hombres eran un porcentaje muy pequeño, fue una diáspora, múltiples deportaciones y muchísimas mujeres tomadas como esposas por los incas, es en estas circunstancias que es posible pensar que muchas de ellas decidieran huir hacia las selvas antes de someterse al capricho de sus vencedores y buscar la protección o la alianza con un antiguo pueblo de mujeres guerreras asentadas en lo más profundo de la selva.
Las chachapollas fueron aceptadas por los amorianos, al haber tenido un origen común en las montañas del Caucaso. Ambos grupos eran una sociedad matriarcal y guerrera. Este grupo luego fue conocido entre los españoles como ‘las amazonas’.
Mención especial hay que hacer al contacto de los incas con la gente de las nubes, con los chachapoyas de los que se creen pudieron haber sido celtas. Es posible que entre estas dos grandes culturas haya habido muchas coincidencias, ¿compartirían un origen común? ¿Serían ambos grupos, los nobles incas y los chachapoyas descendientes de europeos, al menos parcialmente, puesto que pudieron ya estar inmersos hacia el 1470 en un proceso de mestizaje con los nativos.
Es en ese mundo confuso y muy cambiante en el que el mapa político variaba muy rápidamente, con actores muy importantes: los incas, los chachapollas, los amorianos, los españoles y portugueses; en que nació la leyenda de las amazonas sudamericanas.
Sí vemos las leyendas que nos hablan de mujeres guerreras o de fuertes matriarcados alrededor del mundo, podríamos pensar que su cultura, en diferentes matices, se hizo presente en diversas regiones bastantes distanciadas entre sí unas de otras. Esta cultura luego fue substituida por una cultura basada en la fuerte supremacía masculina.
Lugares como el norte de China y su frontera actual con el sur de Rusia, la India, Camboya, alguna isla del Caribe y la selva amazónica pudieron tener un origen común o al menos contactos importantes con esta cultura de mujeres guerreras.
Los amorianos, pueblo caucásico, cuyo origen pudo estar en los montes Caucasos, pudieron estar en la antigüedad relacionados con las amazonas las cuales tuvieron su origen en el sur de Rusia o Turquía, vale decir cerca de los montes Caucasos.
Es llamativo que las amazonas se denominaran así mismas como amorianas, pueblo que fue el primero o uno de los primeros que pobló América, según ciertas teorías. Este pueblo caucásico pudo terminar por establecerse en lo que ahora es la Amazonía y pudo recibir mujeres de origen celta-chachapollas que huían del imperio Inca. Puesto que ambos tenían un origen común.
Existen leyendas sobre mujeres guerreras, en el sur de los Andes, en la puna peruana, donde el matriarcado tiene antiguas raíces. ¿Serían las mujeres chachapollas que fueron deportadas después de la conquista del Imperio de las nubes, es decir de los chachapollas, por parte de los incas. Estos últimos libraron tres guerras en contra de los chachapollas logrando finalmente derrotarlos, esto sucedía apenas el equivalente a dos generaciones antes del arribo de los españoles conquistadores. Lo que los incas hicieron entonces con los chachapollas sobrevivientes, entre los cuales los hombres eran un porcentaje muy pequeño, fue una diáspora, múltiples deportaciones y muchísimas mujeres tomadas como esposas por los incas, es en estas circunstancias que es posible pensar que muchas de ellas decidieran huir hacia las selvas antes de someterse al capricho de sus vencedores y buscar la protección o la alianza con un antiguo pueblo de mujeres guerreras asentadas en lo más profundo de la selva.
Las chachapollas fueron aceptadas por los amorianos, al haber tenido un origen común en las montañas del Caucaso. Ambos grupos eran una sociedad matriarcal y guerrera. Este grupo luego fue conocido entre los españoles como ‘las amazonas’.
Mención especial hay que hacer al contacto de los incas con la gente de las nubes, con los chachapoyas de los que se creen pudieron haber sido celtas. Es posible que entre estas dos grandes culturas haya habido muchas coincidencias, ¿compartirían un origen común? ¿Serían ambos grupos, los nobles incas y los chachapoyas descendientes de europeos, al menos parcialmente, puesto que pudieron ya estar inmersos hacia el 1470 en un proceso de mestizaje con los nativos.
Es en ese mundo confuso y muy cambiante en el que el mapa político variaba muy rápidamente, con actores muy importantes: los incas, los chachapollas, los amorianos, los españoles y portugueses; en que nació la leyenda de las amazonas sudamericanas.